La Consellería de Medio Rural inicia la comunicación a los 166 interesados en la apertura de expediente por exceso de producción de uva en la campaña de 2010, tras las denuncias cursadas por el órgano de control del Consejo Regulador de la Denominación de Origen de Rías Baixas y que fueron trasladadas al departamento provincial de la Xunta en Pontevedra. En total, 151 viticultores y 15 bodegueros recibirán en los próximos días las notificaciones de apertura, disponiendo de un tiempo de 15 días para presentar alegatos a partir de la recepción de la comunicación.
De acuerdo con la Ley 24/2003, de la venía y del vino, estas prácticas están tipificadas como infracciones, al haber incumplido el reglamento interno de la dicha Denominación de Origen consiguiendo rendimientos superiores a los límites establecidos para dicha campaña.
Minoración de las cuantías
En el obstante, conforme al artículo 44.2 de la citada ley, la Consellería está facultada para aminorar de manera motivada la multa impuesta, especialmente cuando no existan circunstancias agravantes, y habida cuenta el volumen de producción. Al igual que hizo el departamento que dirige Samuel Juárez con las sanciones de la cosecha de 2009, escalonando las sanciones a la infracción cometida, en base a la cuantía del beneficio obtenido.
En este sentido, recordar que la aplicación del criterio de proporcionalidad respeto a la infracción cometida se puede aplicar a la Campaña 2010, como ya fue tenida en cuenta por la Consellería de Medio Rural ante las primeras denuncias cursadas por el Consejo Regulador por los excesos de producción de la Campaña 2009.
Eso sí, hace falta advertir que, en el caso de repetirse el exceso de producción en la próxima campaña del 2011, Medio Rural ya no podría aplicar estos atenuantes, porque la propia ley advierte de que se considera agravante a comisión reiterada de la infracción de la misma naturaleza. Recordar aquí que segundo dicta ley, la multa estipulada está comprendida entre los 2.001 y los 30.000 euros.
Llamada a la responsabilidad
Por todo el anterior, la Consellería de Medio Rural hace de nuevo un llamamiento a la responsabilidad de los integrantes del Consejo Regulador y a todo el sector en general, para evitar tanto la imposición de las sanciones como el daño que este tipo de prácticas supone para la imagen y el prestigio de la Denominación de Origen Rías Baixas en particular y del vino gallego en general