Langreo.-La consejera de Fomento, Ordenación del Territorio y Medio Ambiente, Belén Fernández, ha calificado hoy de ?desvergüenza? la actitud del Partido Popular respecto a las obras del soterramiento de Feve en Langreo.
Tras conocer la respuesta parlamentaria en la que el Gobierno de España afirma que la obra es competencia de la comunidad autónoma, Fernández ha señalado que ?el Gobierno del PP está negando su responsabilidad cuando la tiene toda puesto que se trata de una actuación sobre vías de titularidad y competencia el Estado, que además da solución a un grave problema de seguridad ferroviaria, pues la actuación comporta la eliminación de cinco pasos a nivel?.
Para Fernández, el Principado es el único que está actuando responsablemente respecto a esta infraestructura. ?A nuestra llegada al Gobierno a mediados del 2012, sacamos la obra de la parálisis en la que se encontraba y las obras continúan adelante gracias al compromiso inversor del Gobierno asturiano, con fecha de culminación garantizada?.
La titular de infraestructuras ha precisado que a día de hoy están ejecutadas obras por un importe superior a los 40 millones de euros y ha apuntado que el ministerio, para cumplir el convenio, debería poner otros 37,5 millones.
Respecto a las obras de superestructura, ha señalado que, a través de las alegaciones formuladas al Plan de Infraestructuras, Transporte y Vivienda, el Principado ya ha recordado al Gobierno de España que tiene pendiente esta asignatura en Asturias.
Para la consejera, ?tras el tirón de orejas que el Gobierno del PP ha recibido esta semana con la sentencia de los fondos mineros, deberían rectificar en lugar de enrocarse en su negativa; y por otra parte, pedir públicas disculpas a los vecinos de Langreo por el daño que les está causando su actitud de abandono de las obras en vez de echar balones fuera?.
En cuanto a las críticas que ha formulado IU respecto a este asunto, la consejera de Fomento ha afirmado que esta formación solo busca sembrar confusión y sacar rédito político de las molestias que padecen los vecinos con las obras, incluso a costa de encubrir a los verdaderos culpables