Oviedo. E.P.
El alcalde de Oviedo, Agustín Iglesias Caunedo, ha advertido este viernes al Gobierno asturiano que el nuevo Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA) abrirá previsiblemente sin licencia municipal si lo hace en el plazo previsto, concretamente el día 20 de junio, según ha anunciado también este viernes la dirección del Sespa.
Caunedo recuerda que el anillo de los accesos al HUCA aún no está concluido y prevé un caos circulatorio en la ciudad con la entrada en servicio del nuevo centro. En estas condiciones, ha dejado bien claro que él no puede tramitar una licencia de apertura contra los informes técnicos, porque estaría incurriendo en un delito de prevaricación.
Visiblemente crispado, el alcalde ha considerado que mantener la fecha de apertura para dentro de un mes "es un despropósito" y augura un "caos circulatorio".
El primer edil ha recordado que "el informe está emitido y no hay nada nuevo". "Los informes son actos reglados, no es voluntad política, no hay nada que un alcalde ni un concejal de urbanismo pueda hacer si los técnicos dicen que no se dan los requisitos para dar la licencia", ha señalado, porque "adoptar una decisión injusta a sabiendas constituye un delito de prevaricación y yo no me voy a sentar en un banquillo por dar una licencia en contra de los informes técnicos".
Ha acusado al Gobierno autonómico de pretender "mantener un pulso" porque en el tiempo que falta es imposible que se garantice una movilidad adecuada. Más aún cuando, según el alcalde, ayer mismo recibió la visita un técnico del Consorcio de Transportes de Asturias para anunciarle que la semana que viene el Gobierno autonómico trasladará al Consistorio la lista de paradas de autobús relacionadas con el nuevo hospital.
"Tenemos menos de un mes para planificar el cambio de líneas de autobús, para implementar esos cambios sin dejar de prestar atención a trabajadores y paciente del antiguo HUCA", se ha quejado. "Y faltan cinco meses para que entre en funcionamiento el anillo perimetral", ha añadido. Ha apuntado en este punto que "todo el plan de movilidad está diseñado y pensado en torno al nuevo anillo perimentral", un acceso que, ha puntualizado, "fue diseñado por el Gobierno de Areces, no es un capricho del alcalde de Oviedo". El resultado será, según el jefe del Ejecutivo local, que "el nuevo hospital estará cuatro meses funcionando sin estos accesos, con todos los problemas que pueda conllevar".
Caunedo no solo se referido al transporte urbano. Se ha mostrado preocupado por que los taxis no vayan a tener acceso directo, porque no se cuente con los profesionales sanitarios, por que no se cuenta con el Ayuntamiento, por que la movilidad no garantice un acceso digno o por que aún no se sabe dónde están las paradas de autobús. "Las cosas se pueden hacer mejor", ha criticado.