El Sporting, gracias a un gol en el tiempo añadido de De las Cuevas, ganó por 0-1 en el estadio de Balaídos al Celta en partido amistoso con el Trofeo Ciudad de Vigo en juego, que alcanza su XLI edición y que se marchó para Gijón.
Celta: Yoel; Oier, Vilas, Catalá, Lago; Álex López, Natxo Ilsa, Bustos, Toni; Dani Ábalo y Iago Aspas (banquillo: Sergio, Oubiña, Túñez, Joan Tomás, David Rodríguez, Bermejo, Jota y Kevin).
Sporting: Juan Pablo; Pedro Orfila (Canella), Gregory (Botía), Jorge, Damián Suárez; Álex Barrera (Juan Muñiz), Sergio Alvarez (Rivera); Luis Morán (Trejo), Nacho Novo (De las Cuevas), Carmelo (Barral); y Sangoy /Bilic) (banquillo: Raúl y Juan Muñiz).
Árbitro: Manuel Vidal Araujo, del Comité Gallego. Amonestó a Iago Aspas y Dani Ábalo, por el Celta, y a Damián Suárez, por el Sporting.
Incidencias: Tarde primaveral, que no llega a veraniega, con un sol tibio que, según desaparició hizo que bajara la temperatura. Terreno de juego en buenas condiciones. Fue regado en los prolegómenos y también en el descanso. Jorge y Roberto Lago, en la fotografía superior, oficiaron de capitanes. Previamente al inicio del partido se llevó a cabo la presentación de los equipos inferiores del Celta. Unos 4.000 espectadores. Sólo se abrió para el público la tribuna del campo céltico. El Sporting jugó de rojo con ribetes dorados y el Celta, con su habitual indumentaria celeste.
Nacho Novo de enganche
Sabida la alineación, cabía la duda de cómo ordenaría Preciado la línea atacante por detrás de Sangoy y ya los compases iniciales desvelaron que Luis Morán se iba a situar por la derecha, con Carmelo por la izquierda y Nacho Novo de enganche.
La primera opción atacante clara fue para el Celta, pero Juan Pablo respondió rechazando el balón con un gran paradón.
El Sporting no le perdía la cara al encuentro y trataba de combinar. Carmelo lo intentó desde lejos sin fortuna. Mientras, el joven doble pivote planteado por Preciado trataba de alimentar a sus compañeros de ataque, a la par que recibía su ayuda cuando el balón estaba en poder del rival. El encuentro tenía intensidad, por encima de lo habitual de un encuentro de pretemporada. Mutuamente, ambos equipos se mostraban como buenas piedras de toque ante su rival.
Mediada la primera parte Herrer hizo el primer cambio. Dio entrada por Natxo Insa a Joan Tomás, uno de los destacados en esta primera mitad.
El Celta tenía más tiempo el balón y el Sporting trataba de robar para buscar el contraataque. El partido tenía mucho de posicional, de clásico de pretemporada con consignas concretas. El Sporting echaba arriba la línea defensiva. Juan Pablo tenía más trabajo que su homólogo del Celta, pero lo resolvía con seguridad.
Un centro muy cerrado a punto estuvo de comérselo Yoel, que envió a córner. En la ejecución del saque de esquina, Gregory cabeceó desviado. Se cumplía la media hora de juego en Balaídos y el partido se mostraba igualado en líneas generales.
La primera parte finalizó sin goles. El Sporting había jugado bien ordenado, pero denotaba falta de llegada. Tal como en anteriores partidos, pesaban las piernas. Preciado, fiel a sí mismo, no renuncia a la sesión matinal cuando hay partido por la tarde.
El técnico cuenta con la credibilidad de anteriores pretemporadas y el resultado que ofrecen luego durante la competición: lo que se ve en el césped no deja de ser más que un espejo de la exigencia general a estas alturas de la preparación. No obstante, cuando algo no le gusta, no lo calla y envía mensajes a sus hombres, como los posteriores a los partidos en Luanco y en Paços Ferreira.
Sin cambios
Los de la primera parte tuvieron continuidad en la segunda, en el ánimo de acumular minutos de partido de seguido.
El Celta trató de sacar provecho de sus acciones de estrategia, pero sin puntería. En las del Sporting sumaban los centrales al remate, pero también con falta de fruto.
En esta segunda mitad el Celta también pasó a tener más dominio de balón con el Sporting tratando de estirarse al contraataque. La intensidad del juego bajó.
Cuando se llegaba al minuto 20, nuevamente apareció Juan Pablo para meter la mano, enviando a córner un tremendo remate cruzado desde fuera del área.
Un minuto después, cambio generalizado en el Sporting. Damián se fue a la banda derecha tras la incorporación de Canella, Rivera suplió a Sergio Álvares y arriba fueron cambiados todos los efectivos. Por los locales entró Mario Bermejo por Ábalo.
El Celta buscaba con más ahínco la portería gijonesa. A algunos jugadores rojiblancos se les notaba el cansancio. El siguiente cambio en el Sporting fue el de Álex Barrera, que dejó su sitio en el doble pivote a Juan Muñiz.
Al saque de una falta, a la altura del primer poste, Bilic llegó a golpear, pero le faltó colocación y el balón, impulsado con fuerza, salió fuera por poco
De las Cuevas lo intentó desde el vértice izquierdo del área mientras Herrera, el técnico local, introducía nuevos cambios.
De nuevo Juan Pablo, el mejor de la noche, despejaba un remate céltico a córner,
Ya no hubo tiempo para más y el trofeo Ciudad de Vigo se marchó para Gijón.