Barcelona, (andes).- Las historias son parecidas: que están ahí por la pobreza, dicen los migrantes, por la falta de trabajo, el desamparo en el que vivieron por años sin que el Estado los apoyara y en vez de eso los animara a irse.
Quince años después de que abandonara Ecuador para buscar mejor suerte económica en España, Lorena Ati -oriunda de la provincia de Cotopaxi- dice sentirse emocionada por recibir en esta tierra lejana al presidente de “su Ecuador”, Rafael Correa.
Tiene una bandera en sus manos y mientras el presidente ingresa a un recinto en Cataluña abarrotado por cerca de 5.000 personas, se emociona y empieza el cántico de “reelección, reelección”. No está en su tierra, pero dice que siempre está pendiente de las noticias, que el actual mandatario ahora se preocupa por ellos, que los toma en cuenta en sus discursos, que intenta mejorar las cosas para quienes viven en Ecuador y para ellos también.
Lorena tiene dos nietas y se enorgullece al decir que es ecuatoriana, sobre todo ahora, que el presidente de su pequeño país suramericano recibirá el reconocimiento de una universidad de talla mundial.
"¿Cuándo un presidente en Ecuador ha dado esta satisfacción a su pueblo?", cuestiona. Nunca, se responde. "Él es un hombre preparado, humano y con errores como todos pero, que ha logrado lo que ninguno logró en décadas de mandato. Nunca hemos visto a nuestro Ecuador en tan buena situación”, dice conmovida.
Ella asegura que no es “correista”, afirma que es una crítica del gobierno, pero que no puede cegarse ante la transformación que ha tenido el país desde que Correa está al frente del gobierno.
Lorena quiere regresar a Ecuador y que sus nietas estudien en Yachay o en la Universidad de las Artes, asimismo resalta que ha mejorado el sistema de salud, que hay más empleos y que está pensando muy seriamente en volver.
A su alrededor otras miles de personas se emocionan al escuchar hablar al presidente, lo ovacionan, le muestran carteles con frases afectuosas. Hay gente de todas las edades “Correa el líder de la juventud”, reza un cartel que sostienen unas jóvenes de alrededor de unos 16 años y que no alejan de sus charlas la frase “reelección”.
El presidente comienza a hablar, resalta el sacrificio de los que ahora trabajan lejos de su patria por sus familias. “Este doctorado es para ustedes”, señala y Lorena se conmueve hasta las lágrimas.
“Dicen que venimos pagados, pero esta emoción no la paga nadie. Cuando uno está lejos de la patria y salió de un país en crisis, es más transparente ver las mejorías que ha logrado". asegura ella.
El presidente termina su discurso y empieza a sonar música ecuatoriana: ahí se confunden valses, albazos, pasillos. Lorena, de 55 años, afirma que se siente feliz por su Ecuador. “¿Cuantos presidentes que se decían del pueblo han compartido un momento de estos con nosotros? La voluntad del pueblo se gana con hechos y no con palabras y Correa ha hecho mucho. "Que diosito le bendiga", dice y sale rumbo a su casa porque ya se ha hecho de noche.
fuente. http://www.andes.info.ec/es/noticias/migrantes-cataluna-conmueven-hasta-lagrimas-ante-visita-rafael-correa.html