Un nuevo estudio, llevado a cabo por investigadores del Centro Nacional de Datos sobre la Nieve y el Hielo (National Snow and Ice Data Center, o NSIDC, por su sigla en idioma inglés) y de la NASA, demuestra que la temporada de derretimiento del hielo marítimo del Ártico se está extendiendo por varios días cada década. La temporada de derretimiento se inició antes y está provocando que, en algunos lugares, el océano Ártico absorba la radiación solar adicional suficiente como para derretir hasta 1,20 metro (4 pies) del espesor de la capa del casquete de hielo del Ártico.
“El Ártico se está calentando y está causando que la temporada de derretimiento dure más”, dijo Julienne Stroeve, una científica de alto rango del NSIDC, ubicado en Boulder, quien también es una de las autoras principales del nuevo estudio, el cual ha sido aceptado para su publicación en la revista científica Geophysical Research Letters. “La prolongación de la temporada de derretimiento está permitiendo que se almacene más energía del Sol en el océano y que aumente el derretimiento del hielo durante el verano, debilitando de este modo la cubierta de hielo marítima”.
El hielo del mar en el Ártico se ha reducido abruptamente durante las últimas cuatro décadas. La cubierta de hielo del mar se está encogiendo y también está adelgazando, lo que hace pensar a los científicos que este siglo, durante el verano (boreal), podría haber un océano Ártico sin hielo. Según los registros satelitales, en los últimos siete años se han producido las siete extensiones de hielo marítimo más bajas de septiembre.
Para estudiar el inicio de la evolución del derretimiento del hielo marítimo y las fechas de congelamiento desde 1979 hasta el presente, el equipo de Stroeve utilizó datos de los sensores de microondas pasivos proporcionados por el Radiómetro Nimbus-7 de Microondas con Barrido Multifrecuencial (Nimbus-7 Scanning Multichannel Microwave Radiometer, en idioma inglés), de la NASA, así como del Generador de Imágenes y Sensor Especial de Microondas y del sensor SSMIS, colocados a bordo de la nave espacial del Programa de Satélites Meteorológicos de Defensa (Defense Meteorological Satellite Program, en idioma inglés). Cuando el hielo y la nieve comienzan a derretirse, la presencia de agua provoca picos en la radiación de microondas que emiten los copos de nieve, y esto es lo que pueden detectar dichos sensores.
Los resultados demuestran que, a pesar de que la temporada de derretimiento se está alargando en ambos extremos, con un precoz derretimiento que comenzó en la primavera (boreal) y un tardío congelamiento que se produjo en el invierno (boreal), el fenómeno predominante que prolonga el derretimiento es el inicio tardío de la temporada de congelamiento. Algunas áreas, como los mares de Beaufort y Chukchi, se están congelando entre 6 y 11 días más tarde por década. Aunque las variaciones en el inicio del derretimiento son más pequeñas, el ritmo del comienzo de la temporada de derretimiento tiene un impacto mayor sobre la cantidad de radiación solar que absorbe el océano porque coincide con el momento en el cual el Sol está más alto y brilla más en el cielo del Ártico.
A pesar de las grandes variaciones regionales en el inicio y en la finalización de la temporada de derretimiento, la temporada de derretimiento del Ártico se ha extendido, en promedio, 5 días por década desde 1979 hasta 2013.//(Créditos:NASA)