Oviedo.-La Cámara Oficial de Comercio, Industria y Navegación de Oviedo, ha celebrado esta tarde el Pleno de la Corporación en el que, entre otros asuntos previstos en el Orden del Día, el Presidente de la misma, Severino García Vigón, ha presentado oficialmente su dimisión.

Como consecuencia de esta decisión, el órgano plenario acordó la convocatoria de una nueva sesión para la elección del nuevo presidente que tendrá lugar el próximo día 11 de abril. A la vez que el presidente también se ha producido la dimisión del resto de los miembros del Comité Ejecutivo, que seguirán en funciones hasta la citada elección de nuevo presidente.

Tras anunciar su dimisión, Severino García Vigón agradeció la labor de los vocales del pleno por el leal y reiterado apoyo recibido desde su primera elección  en abril del 2002, y manifestó que su renuncia se debe, “exclusivamente a motivos personales” ajenos a la gestión de la institución. García Vigón recordó que ya había anunciado el día de su dimisión en Fade que se mantendría en el cargo “el tiempo suficiente” para dejar cerrados algunos asuntos pendientes que necesitaban una resolución, como la liquidación del ejercicio 2013 o el ajuste de personal acometido en la Cámara en los últimos meses.

En un somero balance de la gestión desarrollada en su mandato de doce años, en los que también ejerció la presidencia de Fade, recordó que esa dualidad fue pionera en España, circunstancia que hizo posible su nombramiento como miembro de los Comités Ejecutivos de la CEOE y del Consejo Superior de Cámaras, llegando a el ser responsable de las relaciones entre las dos instituciones nacionales, entre otras responsabilidades encomendadas.

Y como hitos importantes de su presidencia destacó la creación de las cinco antenas camerales – de un total de siete en  España en aquel momento – en Llanes, San Martín del Rey Aurelio, Mieres, Cangas del Narcea y Luarca, que hicieron posible acercar los servicios de la Cámara de Oviedo a los empresarios de su demarcación.

También hizo mención de la consolidación y fortalecimiento de la Ventanilla única Empresarial para la creación de nuevas empresas que en sus logros siempre estuvo entre las tres primeras de España.

Y no quiso olvidarse de los esfuerzos, no acompañados por el éxito para la creación del Consejo de Cámaras de Asturias, que fueron el germen de la creación de Asturex, sociedad mixta dedicada a la promoción del comercio exterior de las empresas asturianas.

También hizo referencia a las instalaciones ubicadas en el Polígono de Olloniego: Vivero y Aceleradora de Empresas, Escuelas de Automoción y de Hostelería que después de afrontar muchas dificultades inicia su puesta en marcha.

Instalaciones realizadas con el apoyo del Ayuntamiento de Oviedo y los gobiernos de España y del Principado de Asturias.

También puso de relieve el cambio radical que supuso para las Cámaras de Comercio el Real Decreto-Ley 13/2010 que suprimía la “cuota cameral” y la “travesía del desierto” que han tenido que afrontar  - peligro de desaparición de varias instituciones y reducciones de plantilla superiores al 50%, cerca de 2.500 empleos en todas las Cámaras de España  -  hasta la entrada en vigor de la nueva Ley de Cámaras, aprobada el pasado día 20 y pendiente del desarrollo de las regulaciones autonómicas, que las configuran como “prestadoras de servicios y colaboradoras de las administraciones públicas” en ámbitos diversos  y que supondrá un cambio total en el soporte de su financiación.

La Cámara de Comercio de Oviedo, a tenor de tales circunstancias, ha tenido que acometer un inevitable proceso de reestructuración y adelgazamiento, que han condicionado los resultados del pasado ejercicio, quebrando la trayectoria positiva de los años anteriores, con una pérdidas de un millón y medio de euros que habrán de ser compensados con cargo al fondo de reserva acumulado en los años anteriores. Pese a esta situación coyuntural, el mandato presidencial que ahora culmina, deja a la Cámara de Comercio de Oviedo en una situación financiera y patrimonialmente “saneada”, que permite afrontar el futuro con “garantías”.