Con respecto al asesinato por parte de las FARC del mayor Germán Méndez Pabón y del patrullero Edilmer Muñoz Ortiz de la Policía Nacional, el Gobierno Nacional se permite manifestar que:
- Rechaza tajantemente el comunicado del Secretariado de las FARC sobre la muerte del mayor Méndez y el patrullero Muñoz y condena nuevamente ese delito. El mayor y el patrullero se encontraban en poder de las FARC y fueron asesinados de la manera más cobarde e inhumana, en estado de indefensión. No existe justificación alguna de un crimen de esa naturaleza, que es un crimen de guerra y una grave violación de los derechos humanos.
- El hecho de que en La Habana se adelanten conversaciones de paz de ninguna manera libera a las FARC de sus responsabilidades frente al Derecho Internacional Humanitario y al derecho internacional de los derechos humanos. Tendrán que responder por todos los crímenes de guerra y de lesa humanidad que hayan cometido y que sigan cometiendo.
- Mientras no se llegue a la firma de un Acuerdo Final y perdure el conflicto, el Gobierno Nacional seguirá cumpliendo con su obligación constitucional de proteger a todos los colombianos, persiguiendo a las FARC en todo el territorio nacional.
- Si verdaderamente nos aproximamos al fin del conflicto, es hora de que las FARC no sólo lamenten los crímenes cometidos, sino asuman su responsabilidad y les respondan a sus víctimas.