Oviedo.-Varios ciudadanos se han puesto en contacto con AsturiasMundial para manifestar su alarma ante la presencia de varios vigilantes privados provistos de esposas, porras y alguno de ellos con un gran revolver y cinturón de balas ostentosamente situados en la entrada del área comercial del Corte Inglés en el Centro Salesas.
"Después de saber que la Ley les permite detenerte y cachearte, y viéndolos armados con pistolas me entró un miedo enorme, hasta de pasar delante de ellos, así que me marché sin comprar nada", decía una ovetense visiblemente entre asustada y ofendida". "Si piensan que somos ladrones, y ahora que pueden hacerte sabe Dios qué, lo mejor es ir a compar a una tienda", decía otro de los comunicantes.
Aunque no llegaron a entrar a efectuar sus compras habituales, estos indignados ciudadanos acabaron abandonando también el propio Centro Salesas, ya que "me daba miedo por mi hijo pequeño, ver esas armas tan a la vista".
Aunque desde este periódico se trató de calmar a los atribulados denunciantes, explicándoles que aún no está desarrollado el reglamento de la Ley, aunque sí parece que ésta, en principio, permite a vigilantes de empresas privadas detener a los ciudadanos y realizar cacheos corporales en cualquier calle, plaza o centro comercial, según denunciaba ayer el diputado asturiano Antonio Trevín, siguieron insistiendo en su rechazo al, a su juicio, aparatoso despliegue de armas. "Lo mejor será no pasar por allí", insistieron.