Iker: "En el Trofeo Princesa Sofía, si estamos entre los cinco primeros sería un puestazo y entre los diez primeros estaría bien"
Se estrenaron navegando juntos en Nacra 17 el año pasado en el Trofeo Princesa Sofía. ¿Qué valoración hacen de este primer año?
Iker: Un año intenso, lleno de sorpresas, pero bueno, doce meses después seguimos con el proyecto, lo cual indica que las cosas avanzan.
Tara: Después de un año navegando sabemos que podemos estar en los primeros puestos, pero para lograrlo hay que esforzarse y entrenar a diario tanto en el agua como a nivel físico.
¿Cuál ha sido la mayor dificultad con la que se han encontrado?
Tara: Todo es nuevo, pero poco a poco nos vamos adaptando a la convivencia entre nosotros y a las exigencias de este nuevo barco.
Iker: Han sido muchas dificultades a la vez, todas ellas importantes, y relacionadas con empezar algo desde cero.
Iker, ¿cómo es navegar con una mujer? ¿Y con una que es campeona mundial?
Iker: Es muy diferente, la personalidad es diferente, la forma de hacer las cosas es diferente y la tripulación mixta crea una relación diferente a la de dos hombres o dos mujeres juntas, algo que estamos empezando a entender.
Tara, ¿cómo es navegar con un hombre? ¿Y con uno que ha ganado dos medallas olímpicas?
Tara: Navegar con un hombre es totalmente diferente a navegar con una mujer; y en especial con Iker, que tiene las cosas muy claras, su nivel de exigencia es mucho mayor. Por eso que ha conseguido todo lo que ha conseguido. Es muy detallista.
¿Cómo se complementan sus caracteres a bordo?
Iker: Bien, trabajamos mucho en la comunicación, ya que en ambos casos veníamos de navegar durante muchos años con la misma persona y ahora con este cambio tenemos que conocernos mejor como regatistas para poder dar nuestro cien por cien. Básicamente estamos esforzándonos para que podamos trabajar con esa sensación de que todo va fácil entre el entrenador, Tara y yo. Cuando tengamos esta sensación constantemente, ahí empezaremos a ganar regatas.
Tara: Ambos vamos aprendiendo poco a poco el uno del otro y cada día nos entendemos un poco más.
Iker, ¿cómo define el Nacra comparándolo con el 49er?
Iker: En rumbos de popa es muy parecido, en las maniobras y de ceñida no tanto ya que los dos cascos hacen el barco más lento en las transiciones y por lo tanto hay que navegarlo diferente. Algunas cosas me están costando algo más de lo que esperaba, como un cambio de categoría en motociclismo o algo así, pero no me puedo quejar ya que para Tara sí que el cambio ha sido monstruoso, de un 470 a un Nacra 17 y de patrona a tripulante, como cambiar de Moto GP a Fórmula 1.
Tara, ¿cómo define el Nacra comparándolo con el 470?
Tara: Es un barco mucho más rápido que el 470 y, en mi caso, con una mayor exigencia física dado que ahora asumo el rol de tripulante en lugar del de patrona.
Acaban de quedar cuartos en Miami, rozando el podio. ¿Se tomarán la revancha en Mallorca?
Tara: Siempre competimos por lograr el mejor puesto y en esta ocasión por supuesto que será así.
Iker: En el Trofeo Princesa Sofía, si estamos entre los cinco primeros sería un puestazo y entre los diez primeros estaría bien. Estos doce meses han sido de adaptación, han pasado rápido. Hace muy poco que empezamos a poder regatear con cierta consistencia y sin grandes puntos débiles. Ahora es el momento de consolidar todo el trabajo realizado y, si lo hacemos bien, luego podremos dar otro paso y pensar en estar en el podio.
¿Cómo han planteado la temporada?
Tara: Esta temporada tenemos muy claro nuestro objetivo y no es otro que el Mundial de Santander 2014.
Iker: Es una temporada muy importante. El objetivo real de este año es que veamos que podemos ser competitivos en un futuro, pero al final los resultados son importantes y necesitamos hacer buenas regatas entre los diez primeros, también algún podio para darnos una alegría al cuerpo de vez en cuando, y el Mundial entre los diez primeros para conseguir clasificar al país para los Juegos Olímpicos.
¿Cómo es una jornada de entrenamiento típica para Iker y Tara?
Iker: La mañana, a partir de las nueve, es para preparación física y puesta a punto del barco. Tara tiene la responsabilidad de su preparación física, de vital importancia por las necesidades que tiene el tripulante en el Nacra. Yo tengo la responsabilidad de que el barco esté listo para poder navegar, cosa que combino con mi preparación física, menos intensa por ahora, hasta que tengamos el barco más controlado y pueda dedicarme más al físico como hace Tara. A mediodía, a las doce, nos reunimos, comemos y preparamos la navegación. Sobre la una o las dos estamos en el agua y navegamos hasta las cinco. Después de navegar nos juntamos para analizar la jornada y preparar la siguiente jornada. Sobre las siete toca cenar y a eso de las ocho acabamos el día, aunque la realidad es que es muy difícil dejar de pensar en los cambios y mejoras, cada uno por su cuenta hasta que te duermes. Y vuelta a empezar…
¿Toca ya prepararse en serio para Río?
Tara: Desde el principio hemos puesto todo nuestro ímpetu en este proyecto.
Iker: Cada día te preparas a tope, pero por ahora no nos preparamos para Río, tenemos que aprender mucho antes de hacer una preparación específica de cara a los Juegos Olímpicos. Tenemos que ir pasando barreras y la de esta temporada, afianzarnos en la flota, no va a ser nada fácil, paso a paso.