Este incremento adicional se suma a las 7.000 toneladas que han recaído en la bajura y que generarán un impacto económico superior a los 5,5 millones

Santander- El sector de la pesca de altura de Cantabria también se verá beneficiado del incremento de la cuota de caballa conseguido en la reunión de los Estados costeros del Atlántico Noroeste. A lo largo de 2014, los arrastreros regionales dispondrán de 150 toneladas más, de forma que prácticamente duplican la cuota de 2013, según los datos remitidos desde el Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente a la Dirección General de Pesca del Gobierno de Cantabria. 

La modalidad de arrastre litoral del Cantábrico y Noroeste contará así con una cuota de 11.483 toneladas, frente a las 6.479 inicialmente asignadas, la de cerco tendrá 13.700 toneladas frente a las 7.731 de enero, y para otras artes se contará con 14.733 toneladas frente a las 8.335 recibidas en el Reglamento TAC y cuotas.

La consejera de Ganadería, Pesca y Desarrollo Rural del Gobierno de Cantabria, Blanca Martínez, ha reclamado también personalmente a la Secretaría General de Pesca la necesidad de que se agilice en lo posible la tramitación administrativa que aún se halla pendiente para que la costera de la caballa se abra de inmediato y toda la flota pueda hacerse a la mar ahora que la especie se encuentra próxima a las costas.

Se trataría de posibilitar que la flota empiece a rentabilizar de inmediato la excelente cuota negociada para Cantabria. Las simulaciones realizadas por la Dirección General de Pesca han determinado que el aumento de siete mil toneladas adicionales de cuota de caballa para la bajura de Cantabria, cerco (3.292) y artes menores (3.730), supondrá un ingreso ‘extra' de 5,6 millones de euros para las embarcaciones de la comunidad autónoma.

El beneficio pudiera ser mayor ya que la desaparición de la pesca olímpica podría derivar en un incremento de los precios medios pagados por la especie en 2013 (0,80 euros). A esta cantidad habría que añadir además otros beneficios indirectos, como la actividad de las conserveras, que se verá reforzada, hostelería y mercados.