La número uno del PSOE a las elecciones europeas, Elena Valenciano, aseguró hoy que el objetivo “real y profundo” de las elecciones europeas es “reconstruir una Europa con rostro humano”, “una Europa de las personas y para las personas” y para ello es necesaria una nueva mayoría socialdemócrata en el Parlamento Europeo.
Valenciano añadió que “tenemos que dar vida a un nuevo europeísmo y la labor nos corresponde ahora a los socialistas y socialdemócratas, a los progresistas. El nuevo europeísmo que necesita Europa nacerá de la socialdemocracia, porque la derecha no puede, no sabe y no quiere hacerlo. Ha llegado la hora de cambiar el rumbo, ha llegado la hora de la izquierda al timón”.
Durante su intervención ante el Comité Federal que aprobó la candidatura socialista a los comicios del 25 de mayo, Valenciano subrayó que esa Europa que defienden los socialdemócratas es “la que pone el empleo en el primer lugar de sus problemas; y por tanto, lo convierte en la prioridad de sus presupuestos; la que tiene voluntad de cerrar las fracturas y hacer de Europa una cada vez más integradora; la que no quiere caminar hacia atrás, sino hacia delante, en la igualdad y en la defensa de los derechos de las mujeres; la que se indigna, con razón, cuando un gobierno como el de España quiere arrebatar a las mujeres su condición de seres autónomos y libres en lo que se refiere a su maternidad”.
“La Europa con rostro humano es la que basa su competitividad no en salarios bajos y menos derechos de los trabajadores, sino en la calidad y en la excelencia: en el mejor sistema educativo, en la mejor tecnología, en la productividad que nace del pacto social. Es la que no deja tirado a nadie, se llame como se llame y venga de donde venga. Ese lugar en el que todo el mundo sabe que siempre tendrá un lugar en el que le atiendan si está enfermo y una oportunidad para educar a sus hijos en igualdad de condiciones con el resto de los niños y las niñas”, añadió.
Y es, además, una Europa “que esté dispuesta a reformar y mejorar la democracia para que la inmensa mayoría vuelva a creer y a participar en ella”.
La Vicesecretaria General planteó que, al igual que en Europa pudo construirse el Estado del Bienestar es “porque estaban allí los socialistas y los socialdemócratas”, ahora puede renacer esta Europa con rostro humano del siglo XXI, “porque puede haber una nueva mayoría socialista que lo haga posible”. “De eso van las elecciones del 25 de mayo para los progresistas: de combatir la lacra de la desigualdad y defender el gran valor de la solidaridad”.
Primeros compromisos
Valenciano ha explicado que el 25 de mayo vamos a elegir al Parlamento Europeo más poderoso de la historia, pues “decidiremos el poder legislativo y también el poder ejecutivo”, ya que será de la mayoría del Parlamento de Estrasburgo, de donde salga el próximo Presidente de la Comisión Europea.
Serán pues “unas auténticas elecciones generales”, en las que España “pesa mucho” ya que “es una de las mayores circunscripciones”, con más votos y escaños”, de ahí que –como dijo Valenciano- el PSOE vaya a asumir compromisos directos con la ciudadanía.
Así, la candidata del PSOE se ha comprometido, nada más llegar al Parlamento Europeo, a impulsar tres directivas: una para garantizar en todo el ámbito de la Unión Europea la igualdad salarial entre hombres y mujeres, incluyendo sanciones para quienes mantengan la discriminación. Una segunda para establecer salarios mínimos en todos los países de la Unión. Y la tercera para articular una política común de lucha contra el fraude fiscal y para erradicar los paraísos fiscales. A ello se sumará la ya anunciada ley para defender la seguridad de las mujeres contra la violencia de género en la UE.
Tenemos que ganar para frenar al Gobierno del PP
Valenciano, que dio las gracias a todo el partido por la confianza depositada en la lista que encabeza, insistió en la trascendencia de las elecciones europeas y en la enorme responsabilidad que asume el PSOE, porque “es mucho lo que está en juego ese día” .
Así, explicó que “lo que suceda en España el 25 de mayo será muy importante para el resultado global”, “para que haya una mayoría socialista en Estrasburgo capaz de frenar a la derecha europea, que tanto daño ha hecho”, pero “será también muy importante para la política española, porque no nos podemos permitir una victoria de Rajoy que convierta la segunda mitad de la legislatura en un calvario aún mayor que la primera”.
“Tenemos que ganar también para frenar a nuestra propia derecha: a ese gobierno del PP que está usando la crisis como coartada para liquidar los derechos y las libertades y para imponernos especialmente a las mujeres un retroceso de más de 30 años; tenemos que ganar para devolver a los jóvenes el futuro que les están robando; tenemos que ganar porque ganando estas elecciones empezaremos a ganar las próximas: las municipales, las autonómicas y las generales”.
En definitiva, dijo, “el 25 de mayo es el punto de inflexión de la política española, el principio del fin de la hegemonía de la derecha”.
“Necesitamos que en esta primavera aparezca el PSOE de las grandes ocasiones”, remarcó Valenciano, quien añadió que “ahora hay que demostrar, no sólo con palabras sino con hechos y con votos, que el PSOE ha vuelto”.
La política equivocada de la derecha europea
Valenciano ha criticado, no solo sus políticas equivocadas de la derecha frente a la crisis, sino también que haya querido aprovecharla para cambiar el rostro de la sociedad, “apostando por un modelo que los españoles conocemos bien porque lo estamos padeciendo” y que consiste en “trabajos más precarios, salarios y pensiones más bajos, menos derechos de los trabajadores y trabajadoras, menos servicios públicos y más impuestos para la mayoría”.
Y es que, a su juicio, “el gobierno del euro ha protegido mucho mejor al capital de lo que ha protegido al trabajo”; el “Banco Central Europeo se ha olvidado de que el primer problema de Europa, y desde luego de España, es el empleo”, y en vez de la solidaridad, han primado el “mercantilismo” y la “especulación financiera”.
Para la candidata socialista, “la derecha sigue pensando que el Estado del Bienestar es una rémora para el crecimiento y hay que desprenderse de ello”. Del mismo modo que “no defienden un salario mínimo, pero sí destruyen los derechos de los trabajadores, como ha hecho Rajoy con su reforma laboral”.
En este punto, Valenciano ha denunciado que el Partido Popular Europeo haya propuesto como candidato a Presidente de la Comisión “a quien ha estado en el corazón de esta política fracasada y uno de los más destacados ‘hombres de negro’ que han llevado la pobreza y la desesperación a muchos países del sur de Europa”. Alguien que no tendrá el refrendo de los ciudadanos, pero que –insistió- “queremos que, como nuestro candidato, pase por las urnas”.
Pero además de “empeorar la crisis”, la derecha en Europa “ha abierto muchas nuevas fracturas a la vez: entre el Norte y el Sur; entre el interés de los mercados y el de la sociedad; entre los europeos y los inmigrantes; la quiebra de la confianza entre muchos ciudadanos y el Estado democrático, y la fractura del propio ideal europeísta, que pasa por sus peores momentos”.
Así pues, resumió, “lo que presenta la derecha europea después de una legislatura al frente, es una Europa empobrecida, rota y socialmente injusta.
Y además, viejos y conocidos fantasmas vuelven a recorrer Europa: los nacionalismos excluyentes, el fanatismo ideológico, la xenofobia. Todo aquello que históricamente ha traído el desastre para los pueblos de Europa”.
Sin embargo, y pese a que los ciudadanos españoles miran a Bruselas no con esperanza, sino con recelo u hostilidad, e incluso han llegado a pensar que el problema es Europa, “nada más falso y peligroso”, pues “la unidad de Europa ha sido, es y seguirá siendo la única solución, el único camino razonable”.
Y es que “lo que ha fallado no es Europa, sino la política de la derecha”, del mismo modo que “no ha fallado el euro, sino la política insolidaria que se ha hecho con el euro”. Por eso, ha defendido que el proyecto los socialistas está radicalmente en contra de todas las formas de eurofobia y “es contra las desigualdades y por la solidaridad en Europa”.