• CCOO denuncia que las extinciones de contrato han ido ganando peso sobre las fórmulas de flexibilidad interna

Las reestructuraciones de empresas mediante Expedientes de Regulación de Empleo han ido en ascenso en estos años de crisis económica y financiera, tanto en lo referente al número de expedientes como al volumen de personas afectadas. Sirva como dato, que durante el periodo 2008-2013, se han registrado en Asturias más de 4.000 procedimientos que han afectado a miles de trabajadores y trabajadoras.

Los despidos efectuados por esta vía en estos últimos seis años superan los 10.000.  De ellos, alrededor de 5.000 han tenido lugar en los últimos dos años de vigencia de la reforma laboral aprobada por el Gobierno, que está teniendo efectos catastróficos en Asturias.

Los despidos colectivos no han dejado de crecer desde la entrada en vigor de la ley 3/2012, de manera que si en 2011 los trabajadores despedidos por esta vía en Asturias fueron 1.358, en 2012 fueron 2.461, y en 2013 han sido 2.566.  Pero además, las extinciones de contratos han ido ganando peso sobre las fórmulas de flexibilidad interna (regulaciones temporales y reducciones de jornada), de manera que si en 2011 un 5% de los trabajadores afectados por ERE en Asturias lo eran por despido, en 2012 el porcentaje subió al 11%, y en 2013 ha llegado al 13% del total. 

A esta alarmante evolución están contribuyendo los drásticos procesos de reestructuración empresariales que se han ido sucediendo en nuestra región y que, en no pocos casos, responden exclusivamente a una estrategia instrumentalizada por las empresas para aumentar sus márgenes de rentabilidad económica y de negocio.  En muchos de estos procedimientos se registran situaciones de auténtico desequilibrio e indefensión, propiciadas en gran medida por la desaparición de la autorización administrativa previa, que está suponiendo vaciar de contenido los procesos negociadores que, hasta el cambio normativo, se venían desarrollando en los procedimientos de regulación de empleo.

De acuerdo con los recientes datos estadísticos publicados por el Ministerio de Empleo y Seguridad Social, los procedimientos comunicados a las autoridades laborales en 2013 (cuyo número desconocemos, ya que el Ministerio ha dejado de publicar este y otros datos de interés) alcanzaron en Asturias a un total de 19.194 trabajadores, lo que supone un descenso del -16,3% respecto a 2012;  ahora bien, en dicho año las regulaciones se dispararon por la aprobación de la reforma laboral, por lo que el descenso de 2013 no puede ser interpretado sin más como un cambio de tendencia.

AUMENTAN LOS DESPIDOS COLECTIVOS Y LOS ERE NO PACTADOS

Además, en realidad sólo remiten los procedimientos que contemplan medidas de suspensión de contratos y reducción de jornada: las regulaciones temporales afectaron a 13.816 trabajadores, lo que supone un descenso del -21,5% respecto de 2012;  mientras que las reducciones de jornada afectaron a 2.812 trabajadores, lo que significa un descenso del -2,3%.  En cambio, han seguido en aumento los despidos colectivos: 2.566 trabajadores asturianos vieron extinguido su contrato en 2013 por esta vía, lo que supone un 4,3% más que en 2012. 
Si bien el grueso de las regulaciones de empleo del ejercicio siguieron aplicándose con acuerdo entre las empresas y las representaciones sindicales, se detecta un aumento de los ERE no pactados, al menos en lo que respecta a las regulaciones comunicadas a la Dirección General de Trabajo de Asturias: el número de expedientes no pactados creció un +29,8%, y un +7,2% los trabajadores afectados por ellos. 

CCOO EXIGE QUE SE REPONGA LA PRESTACIÓN POR DESEMPLEO

Desde CCOO de Asturias “consideramos preocupante el ascenso de los despidos colectivos, y estimamos que, de no prorrogarse el derecho a la reposición de la prestación por desempleo por parte de los trabajadores regulados, muchas empresas descartarán recurrir a las regulaciones temporales y las reducciones de jornada y optarán en mayor medida por los despidos colectivos”, explica Gilberto García Buelga, secretario de Acción Sindical. 

Cabe recordar que la reposición de la prestación por desempleo y de la cotización a la Seguridad Social de las personas a las que se hubiese suspendido su contrato de trabajo o reducido su jornada por un expediente de regulación de empleo y, posteriormente, se les extinga el contrato por causas económicas, técnicas, organizativas o de producción, viene recogida en la Ley 27/2009, de 30 de diciembre.  Su implantación fue resultado del diálogo social, en un momento de fuerte destrucción de empleo en que los interlocutores sociales y el Gobierno decidieron apostar por la flexibilidad interna negociada en las empresas con dificultades económicas, en línea de lo que ya se venía aplicando en otros países de nuestro entorno. Se trataba de favorecer el mantenimiento del empleo a través de medidas de ajuste que no agotaran los derechos a prestaciones al desempleo.

La medida fue modificada y prorrogada en los años siguientes.  El pasado día 31 de diciembre, tras una andadura de cuatro años, finalizó el plazo de vigencia de este derecho, con un balance positivo. Ello motivó que el pasado 17 de diciembre de 2013, antes de caducar dicha disposición, CCOO y UGT nos dirigiéramos mediante carta al Gobierno para solicitar una nueva prórroga temporal del citado derecho de reposición de prestaciones, sin que el Ministerio de Empleo y Seguridad Social haya remitido respuesta hasta la fecha, lo que lleva a albergar el temor, cada vez más fundado, de que la decisión de la no prórroga ha sido formalmente adoptada por parte del Gobierno.

Desde CCOO “entendemos prioritario dar continuidad a esta medida de reposición de prestaciones a las personas afectadas por ERE, posibilitando que, ante situaciones de dificultad empresarial, se incentive la suspensión temporal del contrato y la reducción de jornada y, con ello, se apueste preferentemente por evitar el siempre traumático despido colectivo”, añade Gilberto García Buelga.
Este informe sobre los ERE que acaba de elaborar nuestro sindicato pone de relieve la gravedad de la situación regional y justifica, al igual que la insoportable cifra de parados, la movilización por Asturias que acaba de plantear nuestro sindicato para los primeros días de abril, en el contexto de una protesta confederal promovida por la CES.