El Consejo de Gobierno ha autorizado declarar Bien de Interés Cultural, con la categoría de conjunto histórico, la localidad de San Esteban de los Buitres, en el concejo de Illano, y Bien de Interés Cultural, con la categoría de monumento, el pozo Sotón, en San Martín del Rey Aurelio.
- San Esteban de los Buitres. Es una localidad en el concejo de Illano, surgida en el siglo XIII, que conserva de manera ejemplar su caserío tradicional, compuesto por viviendas construidas directamente sobre la roca. Se trata de un conjunto arquitectónico con muy reducidos espacios públicos de tránsito, lo que obligó a un desarrollo de las construcciones en altura, algunas de las cuales están unidas entre sí por corredores y pasillos elevados, denominados veiriles. Junto al caserío, en el que en la actualidad viven ocho vecinos de manera continuada, se protege el espacio tradicional de cultivo y trabajo, integrado por las sienras o conjunto de parcelas cultivables (muchas de ellas ya citadas en el Catastro de Ensenada de 1752) y los montes comunales vinculados a los vecinos de San Esteban de los Buitres. En ese ámbito que rodea la localidad, se han conservado diversos elementos que hablan de los trabajos tradicionales de su población: molinos, cortines, palomar, cabañas o bodegas para guardar la producción de vino existente siglos atrás.
- Pozo Sotón. Se trata de una de las primeras explotaciones mineras que se profundizaron en la cuenca central asturiana, en el año 1914, y es la más antigua de los que se encuentran actualmente en uso. Fue concebido por la sociedad metalúrgica Duro Felguera y en 1967 se integró en la empresa estatal Hunosa. Se asienta sobre una explanada muy amplia ganada al río Nalón, en la que se sitúan ordenadamente los distintos componentes que integran la explotación, entre los que destacan sus dos castilletes metálicos unidos por una estructura peculiar, que los envuelve a media altura, lo que permite crear un espacio en el que se desarrolla el trabajo de clasificación del mineral (estructura denominada réter, única en Asturias). Otros elementos destacados del conjunto minero son los edificios de la casa de máquinas, las oficinas (antigua colonia residencial), o la casa de aseos-lampistería. También se conservan varias de las bocaminas que recuerdan el origen de esta explotación como mina de montaña, ya en las décadas finales del siglo XIX.