Ángel González, portavoz parlamentario de IU en la Junta General, pidió esta mañana, tras la comparecencia del gerente de HOASA, Faustino González, en la Comisión de Economía de la Junta General, que el Gobierno paralice el proceso de contratación de un nuevo arrendatario para el Hotel de la Reconquista y revise el pliego de cláusulas para “evitar males mayores en un futuro”, “todo ello en defensa de lo público”.
El diputado advirtió de que la comparecencia no sirvió para explicar las razones del “deterioro” de esta empresa pública y del propio hotel. Entre otros argumentos, González consideró “muy grave” que las condiciones del contrato con la empresa Meliá, actual concesionaria desde el año 2009 y por 15 años, no se “hayan evaluado” y en el último año HOASA haya planteado una novación “favorable a la empresa y negativa para la empresa pública HOASA” y que haya permitido bajar los precios de las habitaciones de un hotel de 5 estrellas a precios por debajo de los 100 euros sabiendo que “Melia cobra por ocupación”. Ángel González aseguró que HOASA era una empresa rentable hace pocos años y ahora, tal como certificó el gerente en su respuesta, “anda un poco apretada”.
González también apuntó que IU no comparte la cláusula que especifica que el nuevo arrendamiento sea por 40 años, lo que llevará a convertirlo “en un nuevo Huerna”, por su concesión a 50 años, en este caso con un edificio patrimonio de todos los asturianos.
El diputado de IU también se mostró crítico ya que a su juicio el pliego de condiciones no establece “garantía” de las inversiones adecuadas para el mantenimiento del hotel ni establece cuáles deben ser éstas, sino que se deja a criterio de la empresa adjudicataria. Del mismo modo, apuntó que el mismo pliego de condiciones deja la puerta abierta a la venta del hotel, incumpliendo la ley aprobada en el Parlamento que prohíbe enajenación.
El portavoz también defendió el derecho de los trabajadores a defender su puesto de trabajo, por lo que preguntó porqué no se respetó en el pliego de condiciones una cláusula de no movilidad geográfica ya que “no les hubiese costado nada”.