La cantaora Carmen Linares ha defendido hoy en Santander que en el flamenco hay que ir “evolucionando con los tiempos” sin olvidar “la raíz y la autenticidad”, algo que se logra, afirmó, “teniendo un gran respeto” por el arte e “intentando dar lo mejor” para hacer “cosas de calidad sin desvirtuar”.
“No se trata sólo de imitar, sino de aportar y darle tu propia personalidad”, dijo en una rueda de prensa celebrada con motivo de la entrega del IV Premio La Barraca, otorgado por la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP) en reconocimiento a su trayectoria y en la que también intervino el poeta y flamencólogo Félix Grande.
Linares se definió como “una artista coherente” y explicó que siempre ha intentado llevar el cante “a la máxima categoría posible” intentado aportar su “honestidad” a un género que es como “la vida misma”, dijo.
La cantaora reivindicó el cante jondo, del que manifestó que es “muy importante” que se considere como un género musical “con la misma categoría” que cualquier otro. “El flamenco es la vida misma”, expuso la artista, quien aseguró que la “emoción de alegría” y la “emoción de tristeza” definen “poéticamente” a este arte.
De toda su trayectoria destacó la antología general que grabó “con todos los cantes que han creado las mujeres a lo largo de la historia” como “un antes y un después” en su carrera y confesó que “me lo paso mucho mejor cantando ahora que cuando tenía veinte”. Después de 40 años en el flamenco, la artista apuntó que ahora tiene “una madurez” que no tenía cuando empezaba, pero también “más responsabilidad”.
“Me quedan todavía cosas por hacer”, señaló Linares, quien estrenó recientemente el espectáculo ‘Oasis Abierto’, donde pone música a la obra de Miguel Hernández. Se trata, añadió, de un montaje “muy vitalista” que intenta transmitir “la alegría de vivir, el compromiso y la solidaridad” del poeta alicantino y que espera poder llevar en breve a los escenarios de París.
Una cantaora general
Por su parte, el poeta y flamencólogo Félix Grande, que será el encargado de glosar la laudatio de Linares durante la entrega del premio, destacó que la artista jiennense tiene el mérito de ser “una cantaora general” que ha abordado todos los estilos del flamenco, algo que supone “una deontología y una moral artística”.
“El flamenco está vivo porque no se queda en lo tradicional”, aseguró el experto, para quien la cantaora ha sabido incorporar “estructuras musicales que no existían” para dotar de “más riqueza” al género, algo que ha hecho además, con “una voz exacta y estremecedora”.
Grande afirmó que Linares “parece estar naciendo mientras canta” y subrayó su capacidad para imprimir “emoción” a poemas de autores tan distintos como Lorca, Machado o Valente, algo que, apuntó, “parece sencillo pero no lo es”.