La definición de agricultor activo es insuficiente para medir el grado de profesionalidad, aunque se haya aumentado al 20% de los ingresos agrarios. Se ha perdido una gran oportunidad para excluir del sistema a los que no viven del campo.
La aportación estatal a la cofinanciación de los fondos de desarrollo rural se reduce del 50% al 30%, poniendo en peligro medidas de apoyo a la incorporación de jóvenes y modernización de explotaciones.
Oviedo.- La Organización Profesional Agraria COAG-ASTURIAS considera que el acuerdo que el acuerdo alcanzado ayer en la Conferencia Sectorial de Agricultura para aplicar la reforma de la PAC en España, ha estado dirigido más al mantenimiento de los “cheques regionales” que a los intereses de los ganaderos y agricultores profesionales.
Los grandes perdedores: agricultores activos y jóvenes.
1. Definición de Agricultor Activo: COAG-Asturias considera insuficiente el porcentaje del 20% de ingresos procedentes de la actividad agraria que recoge la definición de agricultor activo como perceptor prioritario de ayudas a la hora de medir su profesionalidad. Se sigue dejando la puerta abierta a los 300.000 perceptores, no profesionales, que cobran ayudas PAC (un tercio del total). Además, esta situación lastra la competitividad de nuestros profesionales frente a los de países de la UE, caso de Francia o Alemania, en donde sólo reciben ayudas los verdaderos profesionales (en torno a 350.000, frente a 900.000 perceptores en España) y la media de PAC por explotación es un 69% más elevada, (20.000 euros por beneficiario en Francia frente a 5.000 en España).
2. Jóvenes profesionales. El nuevo modelo de ayudas desacopladas sobre la base de las referencias históricas pretende consolidar el esquema de percepción de ayudas PAC de los últimos años, manteniendo importes equivalentes para los actuales beneficiarios del régimen de pago único y cerrando la puerta a los agricultores jóvenes que no hayan percibido ayudas en los últimos años. Este planteamiento, conocido como “statu quo”, sitúa en inferioridad a los agricultores jóvenes, marginándoles e impidiéndoles trabajar en igualdad de condiciones, dificultando el vital relevo generacional.
3. Sectores Ganaderos. Se deberá ser muy riguroso para que no haya tierras de labor y pastos sin actividad que reciban ayudas PAC. Se deberán aumentar los controles de registros ganaderos para comprobar que la dimensión de la explotación está acorde con las hectáreas de pastos asociadas, como pudiera ocurrir en dehesas o grandes propiedades. En cuanto al año de referencia de superficie y derechos, (que se establece en 2013), es necesario un ajuste de las superficies con derechos a ayudas, suprimiendo todas aquellas que tiene derecho a pago pero que sin embargo no se realiza actividad alguna, (podrían estar en torno a las 1,5 millones de hectáreas).
4. Ayudas Acopladas. El acuerdo alcanzado se queda en el 12,9% del presupuesto total de pagos directos, pero desde COAG-Asturias se reitera la necesidad de que se eleve al 15% permitido por la UE para el apoyo a sectores en riesgo de abandono, con problemas de rentabilidad, como el vacuno de leche y de carne o situados en zonas con dificultades específicas, como es el caso de Asturias.
5. Fondos Desarrollo Rural. En el acuerdo aprobado, la aportación estatal se reduce del 50% al 30%, dejando el resto en manos de la administración regional. En este capítulo COAG-Asturias muestra su preocupación ante el hecho de que el Gobierno del Principado de Asturias tenga que poner el 70% de estas ayudas, sobre todo por la situación de prórroga presupuestaria en la que se encuentra nuestra Comunidad Autónoma.
