Con respecto al momento económico ha asegurado que se están produciendo ya datos positivos entre los que ha citado "una inflación del 0,3 en diciembre  que no se había producido prácticamente nunca" y la mejoría en la prima de riesgo, "hace poco pagábamos la deuda española al 7,3 y hoy al 3,6" lo que ha supuesto en el año 2013, según el presidente,  un ahorro de 8.900 millones de euros, "cantidad que sin duda alguna se puede utilizar para otras atenciones que demandan más los ciudadanos".

Para Mariano Rajoy "los datos de crecimiento económico que hemos tenido mueven a la esperanza" incluidos los datos de paro, pues, "aunque no son satisfactorios, ya se ve un cambio de  tendencia que nos hace ser optimistas de cara a este año 2014 y de cara al 2015". Todavía queda mucho que trabajar "pero hoy, a la mitad de la legislatura, estoy en condiciones de decirle a los  españoles que lo peor ya ha pasado. Que soy conscientes de los problemas, de las dificultades y de los sacrificios, pero pronto podrán comprobar que tendrá resultado".

"El año 2012 en nuestro país fue un año que tuvimos que dedicarnos a superar el caos y la situación de quiebra en la que estaba el país con una crisis financiera y una crisis de deuda pública de primer orden. El  2013 ha sido el año para sentar bases sólidas en nuestra economía. El 2014 es el inicio del crecimiento económico y el empleo y el año 2015 es el año de la consolidación del crecimiento económico, el empleo y la bajada de impuestos", ha resumido el presidente.

Mariano Rajoy ha anunciado que la reforma más importante para 2014 es la de los  impuestos y la relativa a la financiación  autonómica. Con respecto a la primera ha señalado que en este momento está siendo analizada por un grupo de expertos "que nos presentarán sus conclusiones  a lo largo del mes de febrero y a mí me gustaría que este proyecto estuviera en las Cortes en el mes de marzo o en el mes de abril".

En cuanto a la reforma laboral ha sostenido que está dando sus frutos, prueba de ello es que  en una situación de crecimiento económico negativo, como la de 2013, se ha empezado a crear algo de empleo y eso "es la demostración inequívoca de que la reforma laboral es una buena reforma" ha subrayado. Además  ha añadido que ha sido muy bien evaluada por un organismo independiente como es la OCDE.

Respecto a la reforma de la denominada ley del aborto, el presidente ha afirmado que está dispuesto a hablar y llegar al máximo acuerdo dentro de los límites establecidos en el Tribunal Constitucional. 

En relación con la falta de entendimiento con la oposición en asuntos de Estado, Rajoy ha puntualizado que hay cuestiones en las que lógicamente discrepan, pero hay otras, que a juicio de Rajoy son muy importantes, como combatir el intento de liquidar la soberanía nacional, la política europea y la renovación de las instituciones, en las que hay acuerdo.

En cuanto a los casos de corrupción,  ha lamentado que se hayan producido y ha dicho que la Ley de Transparencia aprobada por el Gobierno, el Estatuto del cargo público y la reforma del Código Penal van en la línea de impedir que esto vuelva a suceder.

Sobre los sucesos de Gamonal y la actuación del alcalde de Burgos renunciando a la ejecución de las obras, el presidente ha respondido que el comportamiento de la gente en esta época de crisis ha sido "ejemplar" y sobre el alcalde ha dicho que respeta su decisión de rectificar.

El jefe del Ejecutivo ha defendido el coraje de los ministros que componen su Gobierno porque han tenido que tomar decisiones difíciles y lo han hecho con valentía, por lo que les va a apoyar siempre, ha añadido.

Finalmente,  preguntado por la imputación de la Infanta, el presidente ha dicho que le gustaría, como dijo el Rey, que todos fuéramos iguales ante la ley y en ello entra, ha subrayado, "la presunción de inocencia a la que también tiene derecho la Infanta".  A su juicio, no debería renunciar a sus derechos dinásticos.