(Télam).- Al menos 14 personas murieron y 28 resultaron heridas, según las cifras parciales suministradas oficialmente, por un atentado perpetrado contra un autobús, un día después de que una suicida acabara con la vida de 17 personas.
Los dos atentados provocaron una ola de declaraciones de solidaridad con el gobierno y el pueblo rusos, y con los familiares de las víctimas.
El atentado de este lunes tuvo lugar a las 08:10 locales, en un trolebús repleto de la línea N15 que une una zona residencial con el centro de la ciudad.
Entre los heridos figura un bebé de entre cinco y seis meses de edad, informó a los medios la ministra rusa de Sanidad, Veronika Skvortsova, según reportó la cadena de televisión Russia Today.
El presidente ruso, Vladimir Putin, ordenó a todas las agencias federales reforzar la seguridad en Volgogrado y en todo el país, según informó en un comunicado el Kremlin, medida considerada "insuficiente" por el ultranacionalista Partido Liberal Democrático de Rusia.
El mandatario ruso instruyó al comité que se encarga de coordinar los esfuerzos en materia antiterrorista y envió a Volgogrado al jefe del FSB, Alexander Bortnikov, para "reforzar la seguridad en toda Rusia y, específicamente, en la región de Volgogrado", que ya sufrió tres atentados desde octubre, informó Ria Novosti.
Los investigadores creen que los atentados del domingo y del lunes están conectados, ya que las dos bombas empleadas tenían fragmentos metálicos similares, colocados en los artefactos para causar más daños
Varios diputados rusos pidieron en respuesta a los atentados la reintroducción de la pena de muerte para terroristas, algo a lo que se oponen los defensores de los derechos civiles. "Los llamamientos histéricos no ayudan", dijo el responsable de los temas de derechos humanos del gobierno de Moscú, Vladimir Lukin.
Rusia suspendió la pena de muerte en 1997.
El jefe de la delegación de la Unión Europea en Rusia, Vygaudas Usackas, se declaró "shockeado" al enterarse en Moscú del atentado, lo condenó "en los términos más rigurosos", y se mostró "confiado en que los organizadores serán llevados ante la justicia", informó la agencia Ria Novosti.
La vocera del Consejo de Seguridad Nacional del ejecutivo estadounidense, Caitlin Hayden, emitió por su parte una declaración oficial de "condena a los ataques terroristas" sufridos por Volgogrado, donde se solidarizó con el pueblo ruso.
En el comunicado, Estados Unidos ofreció al gobierno ruso reforzar la "cooperación" para garantizar la seguridad en Sochi 2014.
La canciller alemana, Ángela Merkel, mandó un telegrama de condolencias a Putin, a quien transmitió su "más sentido pésame", extensivo a los familiares de las víctimas, y le deseó a los heridos "una rápida recuperación", señaló la agencia alemana DPA.
También el presidente del Comité Olímpico Internacional (COI), Thomas Bach, condenó el atentado en Volgogrado, y reiteró su confianza en el dispositivo de seguridad de los Juegos Olímpicos de Invierno de Sochi 2014.
La explosión de hoy, según los primeros análisis del Comité de Investigación (la Policía federal rusa), fue causada por un artefacto compuesto por cuatro kilogramos de TNT y perpetrada por un suicida y no mediante un artefacto explosivo activado a distancia.
El vicegobernador de la región, Valisi Galushkin, calificó de "horroroso" el ataque y remarcó que el balance de víctimas del atentado es todavía preliminar, informó la agencia Interfax.
"Del trolebús quedó sólo la carcasa (...) La explosión fue de tal fuerza que reventó la ventanas de un edificio de viviendas de cinco plantas que está enfrente", subrayó Markin.
Un total de 28 heridos fueron hospitalizados tras la explosión, mientras que otros 30 siguen en el hospital tras el atentado de ayer en la estación de tren, seis de ellos en estado crítico, según datos actualizados de Sanidad.
Los investigadores creen que los atentados del domingo y del lunes están conectados. Las dos bombas empleadas tenían fragmentos metálicos similares, colocados en los artefactos para causar más daños.
Los dos atentados suicidas que sacudieron a Volgogrado -ciudad que soportó ya tres ataques de este tipo desde octubre pasado- en menos de 24 horas parecen tener el sello de radicales islamistas chechenos.
Es que líderes de la guerrilla islámica que actúa en el Cáucaso Norte habían amenazado con una ola de ataques para impedir la celebración de los Juegos Olímpicos de Invierno, que serán inaugurados en la ciudad rusa de Sochi dentro de seis semanas.
Las autoridades rusas, por el momento, se abstuvieron de señalar a los culpables de los atentados, aunque lo que sí está claro es que ambos ataques suicidas están vinculados entre sí.
Luego de este segundo atentado, Volgogrado, nudo de transporte del sur europeo de Rusia con poco más de un millón de habitantes, quedó presa de miedo y las autoridades tuvieron que calmar a la población y desmentir rumores.
Los principales canales de la televisión estatal cambiaron la programación prevista en vísperas del fin de año, mientras que la región de Volgogrado declaró cinco días de duelo, desde hoy hasta el próximo 3 de enero.
El Partido Comunista de Rusia, segunda fuerza en el Parlamento ruso, pidió a Putin que declare duelo nacional y suspenda todos los actos festivos y celebraciones populares.
Finalmente, oficialmente se dijo hoy que no corre peligro la seguridad de los Juegos Olímpicos de Invierno que se celebrarán dentro de apenas seis semanas en Sochi.
"En lo que a los juegos se refiere, se tomaron todas las medidas de seguridad. No se van a tomar más medidas adicionales", dijo hoy el presidente del Comité Olímpico de Rusia, Alexander Shukov.
Rusia tendrá por primera vez en su historia los Juegos Olímpicos de Invierno, acontecimiento de primera importancia para Putin y para el que se necesitará una acreditación especial también para los espectadores.
Y pese a que los islamistas en la región del Cáucaso Norte amenazaron con perturbarlos, Shukov aseguró que con esa acreditación especial "el espectador será identificado exactamente".
http://www.andes.info.ec/es/noticias/rusia-convulsionada-segundo-atentado-dejo-menos-14-muertos.html