Pese a su retirada del Trofeo Jarama de Navidad, debido a un problema mecánico en su Ford Fiesta ST, Narbona fue capaz de batir su mejor registro histórico en el trazado madrileño, dejando constancia de la evolución llevada a cabo por DNGMotorsport en el vehículo para la próxima temporada.
Diego Narbona quería despedir la temporada 2013 con un buen resultado en el Trofeo Jarama de Navidad, carrera que concluía la temporada nacional de circuitos y en la que el jerezano participaba con su habitual Ford Fiesta ST con el que se proclamó Campeón de España en 2010 y 2011. Pese al esfuerzo, mimo y cariño que tanto el piloto andaluz como todo el equipo DNGMotorsport habían dedicado a la preparación de esta prueba, la suerte no estuvo de su lado debiendo retirarse debido a la inesperada rotura del motor del Ford Fiesta ST.
En las tandas matinales Narbona no pudo aprovechar totalmente el tiempo en pista dado que “las banderas rojas y amarillas fueron una constante. Me hubiera gustado sacar más conclusiones para los entrenamientos cronometrados”, explicaba el propio piloto de DNGMotorsport. Sin embargo en la sesión de clasificación Narbona daba lo mejor de sí mismo y, pese a marcar su mejor tiempo con neumáticos usados y unas pastillas de freno diferentes a las habituales, la vuelta de 1:56.234 – que le ponía segundo de la Clase 2- como Narbona comenta, “era ocho décimas mejor que mi mejor registro histórico en el Jarama con este coche. Tras dos años sin rodar en este circuito es muy positivo rebajar mi propio récord y un buen indicativo de que estamos trabajando en la dirección correcta con el Ford Fiesta ST”.
En carrera la estrategia iba a tener un papel determinante, pero DNGMotorsport se mostraba muy confiado de sus posibilidades pese a tener que afrontar Narbona la carrera de tres horas en solitario. Tras ponerse líder, adelantando de manera brillante al Peugeot 207 RC de Antonio Albacete, comenzó a abrir espacio con sus perseguidores con una vuelta rápida de 1:55.991, mejor incluso que su tiempo de entrenamientos. Pero, en la fatídica séptima vuelta, el motor del Ford “decía basta. Fue algo que no nos esperábamos y un duro golpe.
Pero la retirada, aunque dolorosa, no es óbice para que ignoremos todo lo positivo que tuvo el sábado, como nuestro nuevo récord en este circuito, y pese a que yo he estado dos años apartado de competir en circuito. Estamos desarrollando un buen setting para este coche y, tras el jarro de agua fría, ya he hablado con Ford Motorsport y su motorista para reparar nuestro motor.
En 2014, visto lo visto en el Jarama donde habríamos luchado por la victoria con el rapidísimo Peugeot de Albacete, creo que vamos a ser muy competitivos allá donde compitamos”, sentenciaba finalmente Narbona.