El fiscal coordinador de Terrorismo de la Audiencia Nacional, Vicente González Mota, ha recomendado hoy en Santander actuar contra el “soporte social” que apoya a las organizaciones terroristas para avanzar en el fin de la violencia y evitar que los asesinos se conviertan en “héroes, mártires o gudaris”.
Así se expresó durante la conferencia ‘La evolución de la estrategia de la lucha contra el terrorismo en el siglo XXI’ que se enmarca en el Encuentro ‘Seguridad y gobernanza’ que organiza la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP) durante esta semana, y donde el fiscal insistió en la necesidad de investigar no solo a los comandos, sino a todo el “sustrato social” que los apoya de manera directa o indirecta.
“No podemos respetar mayorías que justifiquen el uso de la violencia para conseguir sus objetivos políticos”, manifestó González Mota, quien reivindicó el papel de la Fiscalía y el trabajo que llevan a cabo las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado de nuestro país en la lucha antiterrorista.
Además, González Mota afirmó que cualquier tipo de terrorismo tiene un “grado de fanatismo” y actúa de manera “organizada”, unas características que lo diferencian de los grupos de delincuencia común. En este sentido, destacó que cuando un grupo terrorista pierde el apoyo social, “desaparece la organización terrorista” y pasa a convertirse en una “organización delincuente”.
De esta forma, el fiscal recordó que la banda terrorista ETA continúa en el lado de la “ilegalidad” ya que, en su opinión, a pesar de haber anunciado este año el cese de acciones ofensivas y un alto al fuego verificable, no ha renunciado a su estructura organizativa. “En estos momentos, ETA está en situación de debilidad operativa y estructural”, apuntó.
Como ejemplo, González Mota explicó que a pesar de la ausencia de atentados de la banda terrorista en España durante 2010, se detuvo a 143 miembros de la organización, 104 en territorio nacional y 39 en otros países. También en el pasado año se registraron 37 acciones ofensivas de lucha callejera en el País Vasco y Navarra, unas actuaciones que “están disminuyendo”.
Por último, el fiscal aclaró que el Estado está “obligado” a garantizar la seguridad de los ciudadanos respondiendo ante el terrorismo “como ante cualquier otro tipo de violencia”, por lo que exigió que se actúe de manera preventiva. “El mejor juicio es aquel que se celebra antes de que se produzca el atentado. Salvamos vidas”, concluyó