La Consejería de Agroganadería y Recursos Autóctonos, a través de los técnicos de la Dirección General de Pesca Marítima, ha liberado, en la tarde de ayer, en alta mar, a un cachalote pigmeo que fue hallado por la Policía Local de Gijón, en la playa de Poniente, sobre las 10 de la mañana. La Policía Local de Gijón dio el aviso al Acuario de la ciudad de la presencia de un cetáceo vivo y varado en la citada playa.

Los técnicos del Acuario se pusieron en contacto con la Dirección General de Pesca Marítima, cuyos técnicos del Centro de Experimentación Pesquera se trasladaron al lugar y determinaron que se trataba de una hembra joven de cachalote pigmeo (Kogia breviceps) de unos dos metros de largo y un peso aproximado de cien kilogramos.

El animal fue trasladado a las instalaciones del Acuario de Gijón, donde fue observado durante horas por si tuviese alguna lesión grave. Una vez comprobado que el ejemplar no presentaba ninguna herida grave que comprometiese su supervivencia, y que se había consultado con la Dirección General de Recursos Naturales, se decidió liberarlo.

Sobre las tres de la tarde de ayer, una embarcación del Centro de Experimentación Pesquera, trasladó al cachalote hasta aguas abiertas. Una vez liberado, se comprobó que sus pautas de comportamiento y natación eran normales. En esta operación participaron tanto técnicos del Centro de Experimentación Pesquera y del Acuario de Gijón.

Desde la Dirección General de Pesca Marítima se destaca que el cachalote pigmeo es una especie ocasional en el litoral asturiano, que no suele acercarse a la costa ya que vive únicamente en alta mar, lo que le diferencia de otros cetáceos como calderones, delfines o marsopas.

Se trata de un animal protegido con la categoría De Interés Especial en el Catálogo Nacional de Especies Amenazadas, que se alimenta principalmente de cefalópodos (pulpos y calamares) y que puede alcanzar una longitud máxima de unos 3,5 metros.