La campaña "Mambrú no va a la guerra" que recorre las ciudades de Colombia contó ayer con un excepcional apoyo: el del propio presidente de la República, Juan Manuel Santos, quien se adihiró a la campaña y dijo, entre otras cosas, las siguientes, en defensa de los niños reclutados a la fuerza por grupos ilegaless, a los que pidió que los devuelvan.
“Decirles que me parece muy importante este evento que se está repitiendo en 27 ciudades del país. Ayer coincidencialmente firmaron allá en el Palacio todos los partidos políticos, todos, un compromiso para evitar el embarazo adolescente, para comprometerse con la educación sexual y reproductiva. Eso hace parte de un sueño que tiene este Gobierno, y es el de respetar los derechos de todos los ciudadanos.
Pero ayer y hoy queremos concentrarnos en los derechos de los adolescentes y los niños. Ayer precisamente cuando el Partido Verde fue a adherir a la Unidad Nacional, una de sus senadoras, Gilma Jiménez, reiteraba cómo en Colombia se violaban los derechos humanos, sobre todo de los niños, y cómo eso debería ser una preocupación para todos los colombianos. Porque si comenzamos violando los derechos de los niños, nunca vamos a dejar de violar los derechos de todo el mundo. Cuánta razón tiene esta senadora.
Por eso este compromiso de hoy, esta campaña de hoy, es tan importante. Ayer dábamos una cifra que estremeció al país: 52 por ciento de los niños que nacen no son planeados. Pero miren esta otra cifra: el 47 por ciento de todos los desmovilizados de la guerrilla y de los grupos paramilitares, el 47 por ciento, cerca de 25 mil, fueron reclutados cuando eran niños.
O sea que este problema es un problema muy serio. Por eso nosotros, todos los colombianos, no debemos descansar un solo minuto hasta que Mambrú no vaya a la guerra sino que baile hip hop. Hasta que Mambrú nunca más vuelva a empuñar un fusil, a disparar un tiro, a que les enseñen a matar. Eso no lo podemos aceptar como sociedad. Por eso esta campaña debe tener el respaldo de todos los colombianos.
Si hay violaciones de los derechos humanos, del derecho internacional humanitario, crímenes de lesa humanidad, tal vez uno de los más graves es el reclutamiento de niños. El dolor que eso produce en el hogar, el dolor que eso produce en la sociedad. Que en lugar de que ese niño vaya al colegio, que pueda disfrutar de la vida. Que lo recluten para enseñarle a matar, eso tenemos que erradicarlo de la faz de la tierra.
Por eso quiero aprovechar esta oportunidad para mandarles a los grupos ilegales un mensaje muy claro: si ellos realmente quieren la paz, como la queremos todos los colombianos, como la quieren estos muchachos que acaban de hacer esta demostración de hip hop, como la quiere Mauricio Rodríguez allá en el Tolima, si quieren hablar de paz tienen que comenzar a hacer unos gestos, como liberar a los secuestrados, como dejar de reclutar a los niños, como liberar a todos los niños que tienen reclutados en sus filas.
Esa sería una demostración de paz que el Gobierno recibiría como un gesto verdadero de una intención de llegar a la paz. Y creo que este es un momento propicio para enviar esa señal.
Por eso les agradezco muchísimo a todos los que han participado en este evento el día de hoy, que están aquí presentes, como la señora Alcaldesa (de Bogotá, Clara López).
Porque este es simplemente un grito que el país hace para decirles a estos grupos ilegales: no queremos más reclutamiento de niños. Que los niños puedan disfrutar de sus derechos, porque eso es lo que nos hace un país con futuro, con bienestar, y eso es lo que debe ser un compromiso de todos y cada uno de los colombianos.
Es un compromiso del Presidente de la República. Y no descansaremos un solo minuto hasta que todos los niños que estén reclutados para cometer crímenes, vuelvan a la sociedad y estén más bien disfrutando de todos sus derechos.
Muchas gracias a todos. Y a todos los niños, a estudiar y a bailar hip hop. Muchas gracias. ¡Mambrú no va a la guerra, eso es otro cuento!”.