· El nuevo año judío (5774) dará comienzo el próximo miércoles 4 de septiembre.
La sinagoga de la Calle Fontán 11 (Oviedo) es el lugar escogido para dar la bienvenida al nuevo tiempo.
El Rosh Hashaná (cabeza del año) brinda una oportunidad para el cambio, para el renacimiento.
Oviedo.-La comunidad judía en Asturias vivirá los próximos días un período muy especial que se inicia con el Rosh Hashaná, el nuevo año judío, cuyo comienzo se enmarca en la caída de las estrellas de la noche del Miércoles 4 de Septiembre. Para recibir una fecha tan señalada Beit Emunáh hace un llamamiento a toda la comunidad judía repartida por Asturias, habilitando la sinagoga que la organización tiene en la Calle Fontán, Nº11, de Oviedo, para acoger las manifestaciones religiosas propias de esta celebración.
El Rosh Hashaná (cabeza del año) es una festividad que nos ofrece una oportunidad de cambiar, de renacer. Tras los rituales religiosos es tradicional que las familias celebraren una cena de bienvenida del nuevo año, en la que se comen alimentos que simbolizan dulzura, bendiciones y abundancia: manzanas, miel, cabeza de pescado, puerro, acelgas, granadas y zanahorias.
El comienzo del año viene marcado también por un periodo de introspección interior en el que se hace un examen de conciencia. Este periodo de 10 días termina en Yom Kipur (que comenzará al anochecer del 13 de septiembre), el día del arrepentimiento y la expiación de los pecados. Este día es el gran ayuno y prácticamente toda la jornada transcurre en la sinagoga donde se viste el talit (manto de oración), símbolo de sencillez y pureza.
Uno de los ritos más importantes es el toque del Shofar, especie de trompeta hecha con un cuerno de carnero, cuyo sonido llama a despertar la conciencia.
