La Consejería de Fomento, Ordenación del Territorio y Medio Ambiente está impulsando el desarrollo de una Estrategia Integrada para la Gestión Portuario-Litoral con la que pretende definir, unificar y regular los posibles usos para los espacios portuarios de los 24 puertos de titularidad autonómica.
Lo explicó esta mañana el director general de Infraestructuras, Juan Fernández Pereiro, durante una rueda de prensa, que ofreció en el marco de la FIDMA, para exponer las principales líneas del proyecto. El director explicó que el trabajo pretende ofrecer una visión estratégica integrada de todos los elementos, factores y actores que inciden en la costa asturiana.
En este sentido habló de los puertos como motores de desarrollo y resaltó la importancia de establecer criterios unificados de gestión y uso para estas instalaciones. Asimismo defendió la integración de estos espacios de los puertos autonómicos con las denominadas “villas costeras”, que constituirán una marca de calidad territorial. Para Pereiro esto deberá realizarse manteniendo las singularidades y particularidades de cada puerto.
Pereiro señaló que el Avance de prioridades del documento de ordenación del Plan Territorial Especial ya ha sido sometido a información pública durante un periodo de un mes y que en este momento se está ultimando la recepción de sugerencias, que serán analizadas para incluir las aportaciones convenientes.
La Estrategia Integrada Portuario- Litoral se plantea con tres objetivos:
- Convertir el litoral en un recurso territorial pujante para el desarrollo económico y social de Asturias, a través de la activación de los recursos litorales para la creación de riqueza y empleo.
- Continuar con la protección de los valores naturales y culturales, a la vez que se favorece la cohesión social.
- Minimizar los riesgos naturales vinculados al cambio climático.
Contempla varias líneas de actuación como establecer criterios de ordenación sobre el sistema de los 24 puertos autonómicos pesqueros y deportivos existentes en Asturias. Buscará ordenar los diversos espacios portuarios y las áreas de transición con las villas marineras, incorporando criterios de gestión, regulando su régimen de usos e identificando las nuevas necesidades.
Busca también la protección de los ecosistemas naturales, que pretende mantener políticas para la mejora de las masas de agua como son las actuaciones en saneamientos.
Recoge también otra línea relacionada con la diversificación económica y la economía azul, en la que se aglutina todo lo que tiene que ver con sacar mayor rentabilidad a los recursos e infraestructuras pesqueras; aprovechar el potencial de las rasas litorales para acoger explotaciones agrícolas modernas, competitivas e integradas en el paisaje; y todo lo que tiene que ver con la tecnología off shore, como tecnología y sector emergente.
También busca aprovechar las capacidades de ingeniería avanzada de las que dispone Asturias; poner en valor la industria de construcción naval, los puertos de interés general, y todo lo relacionado con el turismo litoral y marítimo.
Otro aspecto importante en el que se trabaja y que es pionero en España en este tipo de planteamientos es el estudio de los efectos del cambio climático en la costa asturiana. El documento plantea que si bien Asturias tiene una costa bien protegida y eso es sinónimo de menor vulnerabilidad, nuestro territorio tiene rías sensibles y está altamente expuesto a la acción de las olas extremas, a los problemas de erosión y a las inundaciones.