El senador de IU, Jesús Iglesias, calificó hoy de indigna la posición de la dirección del Partido Popular, respecto a su comportamiento respecto al caso Bárcenas. Más allá, dijo, de que haya que respetar el trabajo de los jueces y de que a ellos les corresponda determinar las responsabilidades, el senador afirmó que, desde el ámbito político ya es posible hacer una valoración. “Primero que hubo financiación ilegal por una cuantía muy importante. Si Bárcenas fue capaz de despistar al PP, como mínimo, 50 millones de euros, que es lo que ahora se ha detectado, la pregunta es ¿cuánto era la financiación  ilegal del PP para que puedan desviar 50 millones sin que se note. Esos 50 millones qué eran, el 5%, el 10%? Estaríamos hablando de cantidades ingentes que sin duda han alterado las reglas del juego electoral. José María Aznar y Rajoy ganan unas elecciones como ventajistas, vulnerando las normas que regulaban el procedimiento y situándose en una posición de ventaja frente a los demás competidores”.

El senador acusó al Partido Popular de haber mantenido un doble discurso, uno para la ciudadanía, a la que ha impuesto recortes y una merma en su calidad de vida, y otro para sus propios miembros, con unos ingresos en los que, además de los obtenidos por sus cargos públicos, se disparaban por los sobresueldos. “Desde el ámbito político,  resulta indigno que quienes han hecho bandera en su discurso político, primero imponer a los ciudadanos sacrificios en el marco de la crisis,  devaluar las condiciones de vida de esos ciudadanos, pues estableciendo reformas legislativas que se han traducido en rebajas salariales, desmontando los servicios del estado del bienestar, que además han aderezado el discurso de que para acompañar a los ciudadanos en ese sacrificio había que reducir los representantes institucionales y las reumuneraciones de estos representantes, a la vez no se conformaban con los salarios ovicial que como diputados, senadores o ministros percibían y exigían de su partido el pago de un sobresueldo,  como mínimo, sin preguntar de dónde salía ese dinero. En asturiano podíamos decir que poníen el cazu, garraben les perres y salíen corriendo sin mirar p’atrás”.

Este comportamiento, aseguró el parlamentario, expresión de una indignidad política colectiva que contamina a la cúpula del PP y que expresa una realidad clara: “la derecha en este país, en la transición, se fue inventando, porque su precedente más próximo era el franquismo. Y en ese invento de la derecha, los poderes económicos, que nunca aparecieron en primera línea, contrataron mercenarios que, para estar ahí, exigían remuneraciones muy importantes por encima de las oficiales”.