Pone como ejemplo el caso francés, donde las corridas de toros se recogen en su lista de Patrimonio Cultural Inmaterial desde el pasado mes de abril 

La Federación Española de Asociaciones de Agencias de Viajes (FEAAV) quiere reiterar públicamente su compromiso con la Fiesta de Toros, manifestando una vez más su deseo de que sea considerado un bien cultural del Patrimonio español valorado por todos.
 
En este sentido, FEAAV considera necesaria la protección de las corridas de toros como patrimonio nacional en la medida en que se trata de una de las manifestaciones más ricas de nuestro país que algunos autores como García Lorca han llegado a definir como “la fiesta más culta que hay en el mundo”.
 
Las corridas de toros entendidas como espectáculo nacen en España en el siglo XII, si bien será en el siglo XVIII cuando la nobleza abandone el toreo a caballo y la plebe comience a hacerlo a pie configurando un espectáculo muy similar al que podemos disfrutar en nuestros días.
 
De este modo, las corridas de toros se han configurado durante estos siglos como la exhibición de masas más antigua de España y una de las expresiones más duraderas de la cultura hispánica.
 
Bajo este marco, y con el objetivo de resaltar la importancia social y cultural de la fiesta, FEAAV reitera su compromiso con la misma, reclamando la necesidad de que sea declarada como bien cultural del Patrimonio español.
 
Esta aspiración ya ha sido alcanzada por Francia donde, desde finales de abril, las corridas de toros se recogen en su lista de Patrimonio Cultural Inmaterial, convirtiendo al país vecino en el primero del mundo en incluir la tauromaquia en uno de los listados más importantes del mundo reconocidos por la UNESCO.
 
En este sentido, cabe resaltar que las corridas de toros llegaron a Francia el siglo XIX, permaneciendo vigentes hoy en día en cuatro regiones del sur: Aquitania, Medios Pirineos, Mediodía-Pirineos, el Languedoc-Rosellón y en Provenza-Alpes-Costa Azul.
 
Esta inclusión en la lista del Patrimonio Cultural Inmaterial por parte de Francia debe servir de ejemplo para valorar la importancia de una Fiesta de los Toros que, en España, se configura también como motor económico generador de empleos (alrededor de 200.000) y capaz de, según los últimos estudios, mover alrededor de 2.500 millones de euros manteniendo cerca de 1.100 empresas ganaderas.