La consejera de Agroganadería defendió esta medida en la Conferencia Sectorial de Agricultura

El ministerio retrasa hasta octubre la decisión sobre los sectores que se beneficiarán y las partidas concretas

Se creará un plan de desarrollo rural  que incluye medidas de I+D para el sector agroalimentario y cooperativas de ámbito supraautonómico

Madrid.-La Conferencia Sectorial de Agricultura y Desarrollo Rural ha acordado hoy que la aplicación en España de la reforma de la Política Agrícola Común (PAC) dé prioridad a las ayudas asociadas a la ganadería, una exigencia que ha defendido la consejera de Agroganadería y Recursos Autóctonos, María Jesús Álvarez, durante las reuniones de trabajo que el Ministerio de Agricultura y las comunidades autónomas han celebrado a lo largo de ayer y hoy en Madrid.

“El acuerdo es que las ayudas acopladas se dirijan a la ganadería, por lo tanto, Asturias tiene que manifestar su satisfacción”, ha declarado la consejera, quien ha calificado de “discreto” el avance general de las negociaciones, ya que la definición de cuáles serán los sectores concretos que se acogerán a las ayudas y las cantidades que recibirán no se decidirá antes de octubre, fecha hasta la que el ministerio ha pospuesto esta decisión.  

Álvarez ha rechazado, en cambio, el modelo pactado para la aplicación de pagos directos a los ganaderos. “Desde Asturias no lo compartimos porque es un modelo a nivel de la comarca y no supone modificaciones con respecto al sistema actual”, ha explicado.

Otro de los puntos en los que se ha llegado a un acuerdo es la creación de un plan de desarrollo rural nacional, que cuenta ya con una concreción económica, como ha exigido la consejera asturiana, para garantizar su eficacia. El plan dispondrá de “238 millones de euros y, aunque no ha quedado definido el ámbito de aplicación, sí los criterios generales, que compartimos”, ha explicado Álvarez. Entre ellos, se encuentran la innovación para el sector agroalimentario y las cooperativas de ámbito supraautonómico, así como la no inclusión de medidas que afecten a un grupo de comunidades frente al resto, con el fin de evitar discriminaciones.

A partir de ahora, una vez sentados los puntos de encuentro más generales, se crearán varios grupos de trabajo que a lo largo de septiembre y octubre tratarán de superar las discrepancias existentes. Se prevé que en octubre, con las conclusiones y propuestas de alcanzadas, una nueva conferencia sectorial apruebe el marco financiero y culmine los acuerdos.