Una inoportuna avería en el motor privó a Dani Juncadella de redondear uno de los dias más esperados en la vida de un joven piloto, conducir un F-1 en unos test oficiales. "Había pilotado un F1 del 2009 el año pasado como premio a mi victoria en la F3 Europa, pero no tiene nada que ver". Aquello era un premio, unas vueltitas con un coche "capado" para hacer las fotos. Esta vez era parte de un test oficial dedicado a los pilotos jóvenes llamados a tener un día un asiento en F1.
Juncadella, de 22 años, forma parte del programa de pilotos de Mercedes, y bajo los auspicios de esta, progresa en el campeonato de turismos alemán DTM. donde el fin de semana pasado alcanzó su primer podio. Sin embargo, Mercedes tiene vetado su participación en los test de esta semana en Silverstone para jóvenes pilotos, y abierto también a pilotos titulares para probar los nuevos Pirelli que se utilizarán a partir del próximo GP de Hungría. Es el castigo por hacer unos tests secretos en Montmeló.
Pero la firma de la estrella facilitó que su joven promesa, Juncadella, no se perdiera la oportunidad. Sin embargo, Williams atraviesa el peor momento de su historia, su peor arranque del mundial, con un coche que figura en el furgón de cola junto a Marussia y Caterham. La avería en el motor de Juncadella, solo le permitió completar cinco vueltas durante la mañana, muy poco terreno para que el joven catalán se acostumbrara al coche.
El mejor tiempo del día fue para James Calado y el Force India, justo por delante del Red Bull de Félix da Costa, que ha dejado el nivel muy alto para Carlitos Sainz, que debutará con un F1 el jueves compartiendo el box de Red Bull nada menos que con Sebastian Vettel