Por OIP Guinea Ecuatorial.-Según algunos artículos publicados en la prensa española, el Partido Popular destinó algunos de los fondos de su contabilidad B para financiar la campaña electoral de Severo Moto. Estas noticias surgen en medio del escándalo protagonizado en España por Luis Bárcenas, ex tesorero del partido, que se encuentra estos días declarando ante los jueces por un supuesto delito de financiación ilegal.
En los últimos días la prensa española se encuentra especialmente volcada en el escándalo protagonizado por Luis Bárcenas, ex tesorero del Partido Popular de España, actualmente en el Gobierno.
Según las noticias que publican los medios españoles desde hace meses, Bárcenas habría sido el principal administrador de una gestión contable y financiera ilegal, sostenida mediante fondos entregados por empresas y particulares con intereses concretos, que el partido repartía entre sus dirigentes y destinaba a diferentes causas.
En las últimas horas, Luis Bárcenas se encuentra declarando ante el juez de la Audiencia Nacional, Pablo Ruiz, al que además ha entregado numerosos documentos que podrían probar estos movimientos financieros.
Según algunos medios españoles, uno de los destinos de la contabilidad B que el PP supuestamente mantendría bajo la gestión de Bárcenas habría ido a parar precisamente al opositor y golpista Severo Moto, con la intención de derrocar al Jefe de Estado, S. E. Obiang Nguema Mbasogo. El objetivo de este apoyo, como no podría ser otro, sería obtener el control del país y de sus importantes recursos energéticos, y repartir todos los negocios entre los empresarios afines al grupo político.
La noticia, que puede leerse en algunos medios de comunicación de España, vuelve a actualizar las sospechas sobre el apoyo del Gobierno del expresidente José María Aznar al fallido golpe de Estado de 2004, organizado por un importante contingente nacional al mando del mercenario Simon Mann.
Algunos de los medios que recogen estas noticias también hacen referencia a estos rumores que muchos conocidos del tema recogen como ciertos, y que algunos de los detenidos por aquel intento de golpe ratificaron en su propia declaración.
