El candidato del PSOE a la presidencia del Gobierno, Alfredo Pérez Rubalcaba, anunció hoy que las cuatro grandes prioridades de su proyecto político son: “crear empleo y hacerlo desde el primer momento”, “porque es lo urgente”; “construir una economía sana y competitiva”, porque es la garantía de futuro; “reforzar la igualdad de oportunidades”, como seña de identidad socialista, y “cambiar la política para hacerla más eficaz más cercana” y “mejorar la democracia”, como nos piden los ciudadanos.
“Desde la confianza en que España es un gran país, os propongo, me propongo y propongo
a los españoles trabajar conjuntamente y coordinadamente para alcanzar esos 4 grandes objetivos”, añadió.
Durante su primer discurso tras ser ratificado como candidato por el Comité Federal del PSOE, Rubalcaba aseguró que ese proyecto estará marcado por la “ambición” y el “realismo”. “Tenemos que ser ambiciosos en nuestras aspiraciones y realistas en nuestras propuestas y en nuestras soluciones”. Por ello- subrayó- “no me vais a oír nunca comprometerme a algo que no me sienta capaz de llevar adelante. Nunca”.
Empleo
En relación con el empleo, el candidato afirmó que “el empleo es una urgencia, una necesidad vital de muchos españoles” y por eso “no podemos esperar a que la economía esté a pleno rendimiento para buscar formulas de creación de empleo, tenemos que ir más deprisa”. En este sentido, se mostró convencido de que “podemos buscar una vía rápida de creación de empleo” y de que “tendremos dinero” para ello. Así, avanzó que dentro de la reestructuración del sistema financiero “muy pronto será el momento de pedir a las cajas y a los bancos que de sus beneficios dejen una parte para la creación de empleo”. “Lo haremos y lo podemos hacer”, dijo.
En este punto, Rubalcaba mostró su especial preocupación por dos colectivos: el de los jóvenes que abandonaron sus estudios atraídos por el empleo en la construcción, y para los que apostó por “programas específicos que combinen formación y trabajo”; y el de los jóvenes que se han formado y tienen títulos, pero no encuentran ahora empleo. Un grupo este último al que –señaló- “hay que darles un primer trabajo, porque sabemos que cuando entras en el mercado laboral, es mucho más fácil quedarse en él”.
Para estos dos colectivos, entre otras cosas, reclamó Rubalcaba ese “esfuerzo” a bancos y a cajas, una aportación de sus “beneficios”, “porque los banca y las cajas pueden y los jóvenes no pueden esperar. Esa es la realidad”.
“Tenemos que tener nuevas empresas que creen nuevos empleos en una nueva economía, porque tenemos que rellenar casi 5 puntos de nuestro PIB” que antes estaban cubiertos por la construcción, explicó el candidato, quien apuntó a las energías alternativas, a la lucha contra el cambio climático y a la atención a personas mayores y dependientes como los tres sectores en los que, a su juicio, se van a crear más puestos de trabajo en los próximos años. Igualmente, manifestó que “seguramente tendremos que plantear nuevas reformas” del mercado laboral. Reconoció que le “gusta mucho” el contrato a tiempo parcial: “creo que debemos incentivarlo, lo hemos hecho, pero tenemos que avanzar más”, precisó.
Defendió también el diálogo y la concertación social para que, por ejemplo, “haya un pacto de salarios y de beneficios empresariales con objetivos compartidos” o para “acabar con la intolerable brecha salarial entre hombres y mujeres” y que “a igual trabajo, igual salario”.
Rubalcaba dirigió también un mensaje a los emprendedores, por los que –dijo- “me voy a partir el pecho” y a los que aseguró que “hay que facilitarles el trabajo y la vida con una fiscalidad razonable” y quitarles trabas administrativas para que puedan competir.
Políticas redistributivas-Impuesto de Patrimonio
Alfredo Pérez Rubalcaba afirmó también, durante su discurso, que “es el momento” de aplicar “políticas redistributivas” para que “aquellos que más se han sacrificado en la crisis, puedan ver recompensado ese sacrificio” y que “aquellos que no han sufrido en la crisis, colaboren para que todos salgamos al mismo tiempo” de ella.
En ese sentido, se mostró partidario de “repensar” y “rectificar” medias como la supresión del Impuesto de Patrimonio. “Creo que ha llegado el momento de volverlo a poner, pero no igual”, para que “no grave a las clases medias” sino que “realmente grave a los grandes patrimonios que existen”.
Mejora de la democracia- Reforma de la Ley Electoral
El candidato socialista reivindicó también el papel de la política y apostó por “cambiar algunas cosas” y “mejorar el funcionamiento de la democracia” para hacerla “más moderna y más eficaz”, porque “cuando los ciudadanos empiezan a pensar que la política no es una solución sino un problema, que todos los políticos son iguales y que su voto no importa, la democracia tiene un problema” y “hay que actuar y revisar cosas”.
En este sentido, apuntó que “hay que escuchar lo que nos están diciendo en la calle y
fuera de la calle”.y, en relación con la Ley Electoral, recordó que los ciudadanos piden más
“proporcionalidad y más cercanía”. Así, afirmó que “ha llegado el momento de plantear una
discusión sobre el sistema electoral” y propuso a sus compañeros del PSOE que utilicen la
Conferencia Política para discutir esto a fondo y salir con una propuesta de reforma del
Sistema Electoral”. Rubalcaba explicó que, en este ámbito, su modelo es el alemán, “de
circunscripciones pequeñas, que favorecen la relación entre el representante y el
representado y un resto nacional que favorece la proporcionalidad”.
También apostó por hacer “completamente limpia” la política; “que sea limpia y que
parezca limpia”, porque “no sólo se trata de perseguir la corrupción, sino de evitar” que haya
corrupción. Para ello propuso que “el Estado tenga algún tipo de competencias, algún tipo de
control previo sobre los planes urbanísticos para impedir la corrupción.”
A su juicio, lo más importante de todo es “cambiar las formas de actuación política”.
“He hecho muchos esfuerzos, pero voy a hacer muchos más para que la crispación y el sectarismo pasen definitivamente al rincón de la historia, al pasado de donde nunca debieran haber vuelto”.
Aseguró, igualmente, que una de sus exigencias será la “austeridad” en los comportamientos público y privado porque “pienso que si no vives como piensas, acabas pensando como vives”.
Mantener las señas de identidad socialistas
En otro momento de su intervención, Rubalcaba aseguró que el Partido Popular es “nuestro adversario”, pero que “nuestros enemigos”, los de ayer, hoy y siempre, “son el miedo, la inseguridad, la desigualdad, el desamparo, la injusticia, la intolerancia…” y a esos ‘enemigos’ –dijo- “les hemos hecho frente siempre como lo que somos: los aliados del progreso y del cambio”.
Apostó por seguir manteniendo las “señas de identidad” socialistas basadas en la defensa de nuestros principios, la capacidad de adaptarnos a los cambios y la capacidad de “ofrecer un proyecto mayoritario al conjunto de los ciudadanos”.
En definitiva, “tenemos que adaptarnos a los cambios desde nuestros principios” y
“echar muy poco la vista atrás”. “Hay quien cree que atrás se encuentran las soluciones de
los problemas, nosotros no. Si como algunos piensan miramos 10 años atrás, no nos vamos
a encontrar con las soluciones de la crisis, nos vamos a encontrar con el origen. No hay que
mira hacia atrás”, afirmó Rubalcaba.
Educación
En materia de Educación, el dirigente socialista remarcó que “un sistema educativo es
lo que vertebra a un país” y se comprometió a “no cambiar ninguna de las leyes educativas
que actualmente están en vigor en nuestro sistema educativo”, porque “la Educación no
necesita zarandeos legislativos, sino consenso, dialogo y estabilidad en su marco legal”, y a
“trasplantar el MIR a la Educación para seleccionar a los mejores”.
Sanidad
Respecto a la sanidad pública española, que “nos enorgullece porque es muy buena”
y “barata”, Rubalcaba dijo que, al igual que para el Partido Socialista, ésta “es una de las
pocas cosas sagradas e intocables para el conjunto de los españoles”. Por eso, afirmó que los
socialistas harán “bandera de la sanidad pública” y prometió que no hará “nada” que debilite
nuestro Sistema público de Salud. Y “nada es nada”, reiteró.
Sí apostó por “ser más eficientes” porque gastamos 70.000 millones al año en
Sanidad y habrá que ahorrar o “gastar mejor”, por ejemplo en Farmacia, y gestionar “mejor”.
FOTO: web PSOE