Pereira (SIG).- Al participar este jueves en la colocación del primer ladrillo del Centro de Convenciones de Pereira, Presidente Juan Manuel Santos afirmó que el Estado de Derecho, la propiedad privada o el modelo de desarrollo de Colombia no están en peligro en las conversaciones de La Habana, porque "nada de eso está siquiera en la mesa de negociación".

Estamos entregando una serie de reglas de juego para que esta gente cambie las balas por los votos, pero no estamos poniendo en peligro nuestro Estado de Derecho, nuestro concepto de propiedad privada, nuestra Constitución, nuestras leyes, nuestro modelo de desarrollo. Nada de eso está en peligro. Nada de eso está siquiera en la mesa de negociación", reiteró el Mandatario.

El Jefe de Estado señaló que lo que el Gobierno ha querido hacer para transformar el sector rural, es "inclusive más audaz de lo que las Farc han venido pidiendo hace 20, 30 ó 40 años".

Lo único que pusimos fue el sector rural, porque lo que queríamos hacer nosotros con el campo era algo inclusive más audaz de lo que las Farc han venido pidiendo hace 20, 30 ó 40 años, porque sabemos que en el campo colombiano está concentrada la pobreza, porque sabemos que tenemos una deuda infinita con el campo si queremos cerrar esa brecha entre lo urbano y lo rural", dijo.

Y agregó: "Porque sabemos que tenemos que hacer unas inversiones cuantiosísimas si queremos realmente explotar el campo como debemos, en un mundo muy apropiado porque estamos comenzando a vivir una crisis de alimentos, y Colombia es uno de los pocos países que tiene la capacidad de aumentar en forma sustancial el área y la producción de alimentos".

De acuerdo con el Presidente de la República, las grandes inversiones para desarrollar el campo colombiano se harán con o sin Farc. "Pero tenemos que hacer unas grandes inversiones. Entonces las vamos a hacer con o sin Farc. Yo prefiero con, porque nos quitamos de encima esa mula muerta que tenemos, ese obstáculo a nuestro desarrollo, que es el conflicto", sostuvo el Jefe de Estado.

Foto: César Carrión - SIG