El presidente Danilo Medina dejó oficialmente inaugurada este jueves la Plaza Sambil, ubicada entre las avenidas John F. Kennedy,  Máximo Gómez y calle San Martin y es considerada por sus propietarios como el mayor centro comercial del país con 330 tiendas que han generado unos cinco mil empleos directos e indirectos.
 
El mandatario llegó a Sambil a las 10:57 de la mañana, siendo recibido por sus propietarios, Salomón Cohén, Esther de Cohén y sus hijos Alfredo y Salomón, quienes junto a su socio ingeniero Miguel Vargas Maldonado y su esposa Angelita, dieron la bienvenida al jefe del Estado.
 
Después del corte de la cinta para dejar inaugurado el centro comercial, el presidente Medina se dirigió con sus anfitriones hasta la tercera planta de la plaza, donde recorrió el área de restaurantes, saludó a visitantes y dependientes y luego bajó al segundo nivel, donde se produjo el acto protocolar.
 
Las familias Cohen, Corripio y Danilo Medina
Las palabras de bienvenida fueron pronunciadas por el empresario asturiano Manuel Corripio, propietario de Cinema Centro, quien resaltó ante los propietarios de Sambil, que “no sólo llegan al mejor país de la zona como destino de sus inversiones, sino que lo hacen en el mejor momento”.
 
“El honor de contar con la presencia de nuestro Excelentísimo Señor Presidente, quien encabeza este acto, demuestra su compromiso con la inversión extranjera, de manera muy especial la inversión honesta, legal y legítima, aquella que tan sólo se sustenta en la inversión, el trabajo tesonero y la eficiencia y no en cuestionables contratos”, afirmó.
 
Agregó que  los propietarios de Sambil encontrarán en el presidente similitudes con su estilo. Relató que Medina también tuvo un sueño de que nuestro país progrese con igualdad para todos, “él también es un trabajador infatigable que no conoce un día de descanso, él también encontró escépticos en su camino que le pidieron desistir de su idea, a lo que afortunadamente puso oídos sordos”.
 
El empresario dominicano aseguró que el presidente también emprendió un proyecto con dificultades, “él también tiene un estilo de inusual sencillez y pragmatismo, él también tuvo la visión de ver oportunidades de mejoría cuando algunos pensaban que eso no era posible y que la recuperación de nuestra economía sería cosa de años, habiendo demostrado que ha sido cuestión de meses; él piensa y planea, pero sobretodo actúa. Su lema Manos a la obra, lo retrata”.
 
A nombre de los socios habló el ingeniero Miguel Vargas Maldonado, quien resaltó que Sambil generará dos mil empleos directos y tres mil indirectos. En la construcción de la plaza, que se levantó en contra de algunos vaticinios negativos, dijo, laboraron otros 3,000 trabajadores dominicanos.
 
Destacó que la presencia del jefe del Estado en el acto inaugural es una muestra de apoyo y de soporte a la inversión nacional y extranjera.
 
A nombre de la familia Cohén habló el señor Freddy Cohén, quien afirmó que Sambil Dominicana es la primera plaza  construida fuera de Venezuela, donde cuentan con otros siete centros comerciales, preparándose para abrir otros tres en ese país sudamericano y otro en Madrid, España.
 
Indicó que llegaron a República Dominicana atraídos por la similitud entre dominicanos y venezolanos y por el buen clima para las inversiones extranjeras.
 
Concluido el acto protocolar, el presidente Medina, sus anfitriones e invitados especiales disfrutaron de un espectáculo de danzas folklóricas dominicanas y venezolanas a cargo de los ballets Yolanda Moreno, de Venezuela, y del Ballet Folklórico Nacional, dirigido por la profesora Josefina Miniño.
 
Sambil, una imponente obra de la arquitectura y la ingeniería
Sambil consta de cuatro plantas levantadas en una porción de 38,000 metros cuadrados con 233 mil metros cuadrados de edificación con 2,400 parqueos y unos 70,000 metros cuadrados de área de boutique, que a juicio de sus propietarios la convierten en el proyecto comercial más importante de la República Dominicana.
 
Cuenta también con una gigantesca área de entretenimiento, de restaurantes, de expendio de comidas y en pocos meses será inaugurado el Museo Marino Aquamundo, el cual definen como el único en su estilo en el país, donde serán exhibidos unos cien mil peces de las más exóticas variedades del mundo en 300 mil galones de agua con una selva tropical, un jardín de corales gigantes, cascadas, numerosos acuarios y un túnel con tiburones y anguilas, que es construido a un costo superior a los cuatro millones de dólares.