Por B. SOLÍS/AM.-Teclee las palabras “Belarmino, uno más de los sin nada” en cualquier buscador de internet. Al momento le aparecerá un enlace desde el que se puede descargar el libro del mismo título que recoge tres años de trabajo de su nieto Rafael Fernández Tomás –hijo de Rafael Fernández, expresidente del Principado- sobre el que fuera presidente del Consejo Soberano de Asturias durante la guerra civil. El trabajo contiene documentos inéditos de gran interés, pero, sobre todo y en palabras de su nieto, refleja “la lucha de un hombre como hilo conductor de una generación de socialistas, comunistas, anarquistas y republicanos en su esfuerzo por defender la legalidad republicana, rota el 18 de julio de 1936”.
Al inicio de la rueda de prensa, Rafael Fernández Tomás hizo una declaración de principios: “Soy republicano, socialista y creo en el marxismo como método de análisis”. Dichas palabras no ocultaban, sin embargo, su profunda decepción con el PSOE asturiano: “Tardé más de 10 meses en ser recibido por el señor Javier Fernández y otro tanto por el señor Sariego. A mis espaldas se comentaban las más variadas ideas. ‘Se dice que vienes huyendo de México’; ‘a medrar con el partido en Asturias’; ‘se dice que no se sabe cómo tu padre pagó el apartamento’, etcétera”. Para concluir con las especulaciones, sentenció: “He vivido en Asturias con 11 euros diarios estos años”.
El error de Foro
El político astur-mexicano volvió a dejar claro que su afiliación al partido que lidera Francisco Álvarez-Cascos: “Desconocedor de España y Asturias, por vivir 67 años en México, cometí el error de incorporarme a Foro Asturias, sin saber que su dirigente había sido la mano derecha del mismísimo señor Aznar”. Porque, además de para reivindicar la memoria de su abuelo, el regreso de Rafael Fernández Tomás se debe, en buena medida, para luchar contra el expresidente del Gobierno español, a quien acusa de la derrota de la izquierda mexicana:
“En 2006 la intervención de José María Aznar aliado con el asesor de George Bush Karl Rowe, fue tan clara que, en un padrón de 64 millones de electores, solo por 200.000 venció Felipe Calderón [frente a Andrés Manuel López Obrador, candidato del Partido de la Revolución Democrática]”. Y prosiguió: Consultada mi familia, decidí hacer uso de mi doble nacionalidad y, en lugar de luchar contra el empleado Felipe Calderón, decidí venir a España a colaborar con el pueblo español contra el ‘jefe’ José María Aznar y su sucesor Mariano Rajoy.
Pero esta larga temporada en Asturias ha sido intelectualmente muy fructífera. Además de la obra presentada, “Belarmino, uno más de los sin nada” (que se puede descargar gratuitamente Tecleando el título en cualquier buscador de internet, o bien directamente en el enlace http://www.bubok.es/libros/224880/Belarmino-Uno-mas-de-los-sin-nada), Rafael Fernández Tomás ha terminado ya otros tres libros: “Pura y Rafael, 150 años de moral pública”, sobre sus padres; “Entre mareas (entre Onega y Chicxulub Puerto)”; y “De un tercermundista a un europeo”, en el que se hace un análisis de dónde viene y a dónde nos llevará la crisis. Todos estos trabajos los irá colgando en la red en los próximos meses: concretamente en septiembre, noviembre y diciembre, siempre con acceso gratuito a ellos.
Asturias contra la Legión Cóndor
“Belarmino, uno más de los sin nada” recoge los trabajos del Consejo de Asturias y León, con documentos inéditos como la declaración de soberanía, el análisis de los integrantes del Consejo de Defensa de por qué se perdió la batalla de Grado (que permitió el paso de las tropas gallegas para reforzar a los alzados en Oviedo), y el informe presentado al gobierno de la II República en 1938 en Barcelona sobre los trabajos del Consejo en esos 461 días: “La lucha, la soberanía, el porqué no llegó el [barco republicano de guerra] Ciscar a tiempo con el armamento, y el caótico final al caer el Frente Norte”, explicó Fernández Tomás.
Pero, sin duda, una de las historias más curiosas que recoge el libro es una cita a Asturias de Adolf Galland, aviador miembro de la Legión Cóndor de los nazis: “En esas memorias se habla de las importantes fortificaciones que habían realizado los asturianos y cómo tuvo que usar unas rústicas bombas de napalm; es decir, que los asturianos recibieron el napalm 25 años antes que los vietnamitas por parte de la aviación norteamericana”.