Villaviciosa.-En un momento en el que varios concejos de Asturias están inmersos en largos periodos de consultas ciudadanas para determinar la mejor fórmula para regular el aparcamiento, el equipo de gobierno de Villaviciosa presenta, como asunto de urgencia, una ordenanza para cobrar el aparcamiento en la playa de Rodiles, con el fin de ser aprobada en el pleno de esta misma semana.
“En agosto del año pasado el Sr. Alcalde manifestaba en prensa «Es un debate que deberíamos tomar en serio», en referencia a la opción de establecer aparcamiento de pago en Rodiles. No parece un procedimiento muy serio introducir la ordenanza como asunto de urgencia seis días antes del pleno en el que se pretende someterla a aprobación, y sin haber hecho ninguna consulta previa con vecinos de la zona, entidades ciudadanas del concejo ni empresarios del sector turístico”, indicó López.
“Tampoco está en absoluto claro que se disponga de los informes favorables de los titulares de los terrenos en los que están ubicados los aparcamientos, el procedimiento que se va a seguir para implantar el pago, las condiciones en las que el servicio sería adjudicado a una empresa, qué consideración tendrán los trabajadores de los negocios de la zona, al igual que existe poca consistencia en el concepto de “residente”, pudiendo provocar agravios comparativos; tanta es la falta de claridad que en los medios leemos de boca del Sr. Alcalde que se pretende establecer una zona azul junto al eucaliptal, en la que habría cien plazas de aparcamiento, con un tiempo máximo de estacionamiento de «una hora y media o dos» con el objetivo de «favorecer la rotación de vehículos», mientras que dicho aspecto no ha sido explicado en ningún momento en la Comisión Informativa, ni la ordenanza reguladora lo recoge de modo entendible”, añadió López, “además de dejar la puerta abierta a que el propio Alcalde pueda conceder directamente “tarjetas especiales” de horario ilimitado con un año de duración”.
“Consideramos que el hecho de que el aparcamiento sea de pago no resuelve el grave problema de atascos que se sucede continuamente sobre todo en las horas punta de salida masiva de la playa y que se debe a que sólo tiene una vía de entrada y salida provocándose tapones, como tampoco soluciona a priori el problema de que las plazas sean insuficientes; se trata de una medida que desincentiva que la gente acuda a la playa, con las consecuencias que esto pueda traer en la situación socio-económica en la que nos encontramos. Se trata de imponer que, lo mismo de lo que se disponía hasta ahora, pase a ser de pago, en lugar de tratar de mejorar previamente el servicio”.
“Es necesario que se analicen otras posibilidades, como localizar terrenos en los que poder colocar aparcamientos disuasorios, cuestión que estuvo en estudio por parte del Principado hace seis años sin haber llegado a ningún puerto, al igual que siguen sin respuesta las reivindicaciones vecinales de dotar de mayor seguridad a la carretera de acceso a la playa, a pesar de que la Dirección General de Carreteras preveía acometer la habilitación de pasos de peatones en la zona de Selorio el pasado año, y sin que se observe por parte del equipo de gobierno ningún afán de insistir en el asunto”, concluyó López.