Oviedo.-La Policía Nacional de Oviedo recibió una denuncia de un señor mayor nacido en el año 1929, de haber sufrido lesiones producidas por su hija de 41 años manifestando, muy compungido, que no le deseaba ningún mal, tan solo que no le siguiera pegando.
La convivencia en el domicilio familiar parece ser que era difícil debido al fuerte carácter de la hija.
El anciano manifestó que ya no podía aguantar más, ya que también había pegado a su mujer y madre de la denunciada.
Los hechos se habían producido hace unos días y el anciano había acudido el médico ya que sufría fuertes dolores que le impedían respirar correctamente.
En el Centro Sanitario le diagnosticaron las fracturas pero al ser preguntado informó al médico que las heridas eran consecuencia de una caída, dado que le daba mucha vergüenza decir que le había pegado su hija.
Aguantó unos días más pero las discusiones no disminuyeron y en el día de la denuncia, su hija había empujado a su madre, en el transcurso de una discusión y ante el temor de que le pasase a su mujer lo mismo que a él, decidió presentarse en Comisaría para formular la correspondiente denuncia.
Los policías se personaron en el domicilio familiar donde se encontraba la hija y procedieron a su detención como autora de lesiones en el ámbito familiar.
Los hechos fueron puestos en conocimiento del Juzgado correspondiente.