El secretario general de la Secretaría General Iberoamericana, Enrique Iglesias, ha señalado hoy en Santander que a Europa le faltan respuestas consensuadas y un background internacional que aborde los “grandes problemas globales” que hay en el mundo “para no terminar mordiendo el estado del bienestar”.
“Extraño la capacidad de formar opiniones, de ponerlas en marcha y de proceder con rapidez”. Así reflexionó durante su intervención en la clausura del X Encuentro Santander-América Latina. ‘Latinoamérica 2020. Nuevas y viejas ideas’ que se ha celebrado esta semana en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP), con el patrocinio del Banco Santander.
En este sentido, Iglesias consideró que Europa “está entrando” en una nueva sociedad internacional que “llevará mucho tiempo en consolidarse” marcada, dijo, por la transferencia de poder económico “más grande de la historia”. A su juicio, esto supondrá complicaciones de ajustes en las variables económicas y en los valores “más o menos compartidos o conflictivos”.
Para el secretario, todas estas transformaciones en la economía, en el crecimiento de las clases medias y en el “aumento de la globalización a todos los niveles” traen consigo consecuencias sociales “inéditas”. Así, el secretario se refirió al fenómeno de los indignados que, a su juicio, recoge un estado de insatisfacción que tiene que ver con la idea de que el estado del bienestar “está siendo mordido” por la “incapacidad de la economía” para hacerle frente.
En este contexto internacional, Iglesias explicó que los países emergentes aparecen con una fuerza “espectacular”, “inédita” e “inimaginable”. Sin embargo, y poniendo como ejemplo el fenómeno de la sociedad china, apuntó que estos estados no pueden tener “un crecimiento lineal” y aseguró que también vivirán ajustes “con repercusiones importantes”.
En relación a América Latina, el secretario valoró como “totalmente impresionante” los pasos que se han dado en el conjunto de países del continente americano aunque, ironizó, “un poco tarde en la historia”. En este sentido, subrayó la buena gestión de la macroeconomía, la solidez de la banca y las políticas sociales innovadoras como los grandes proyectos que han impulsado al continente. “Creo que América Latina entrará en una nueva década si reconocemos que eso no es gratis y si el mundo no nos juega una mala pasada”, aseguró.
En esta línea, el secretario añadió que “este es el momento de hacer cosas” porque América Latina cuenta con muchas reservas que le permitirán abordar “la revolución de la educación de calidad, de la productividad, y de la reforma hacia un estado más eficiente”. Para terminar, Iglesias apostó que en 2020 varios países de América Latina podrán llegar a la categoría de países desarrollados, algo que valoró como “un triunfo enorme”.