El asturiano cruzó la bandera a cuadros en la vigésima posición
Dijon.- Dos paradas en boxes en las primeras vueltas, debido a que el motor de su coche se quedaba en siete cilindros al aflojarse una bujía, arruinaron las opciones de Javi Villa en la segunda carrera de la NASCAR europea disputada este fin de semana en el circuito de Dijon. Aun así, el asturiano demostraba de nuevo su rapidez, siendo el piloto con mejor ritmo en pista una vez retornaba al trazado tras su última detención en el box, aunque el mucho tiempo perdido hacía que sólo pudiese concluir la carrera en el puesto veinte.
Después de la mala fortuna del sábado, Villa partía el domingo desde la tercera plaza y se sentía fuerte y con opciones de luchar por la victoria, ya que su ritmo de carrera del día anterior le situaba entre los más rápidos. Sin embargo, nada más arrancar el parragués notaba como el motor de su coche no funcionaba correctamente y no tenía más remedio que dirigirse a boxes donde se detectaba el problema de la bujía, volviendo a pista con dos vueltas perdidas.
Apenas un par de giros después, se volvía a repetir el fallo, lo que significaba una nueva parada en el box para Villa, que perdía otra vuelta. Al menos, esta vez la reparación surtía efecto y Javi podía reincorporarse a la carrera y rodar ya sin problemas hasta el final de la misma, haciéndolo además con un magnífico ritmo, ya que era el piloto más rápido en pista durante la mayoría de los giros que restaban hasta la llegada, cruzando bajo la bandera a cuadros en la vigésima posición.
Un resultado decepcionante que pone el colofón a un fin de semana lleno de problemas totalmente ajenos al piloto. En los pocos momentos en los que el coche ha funcionado, Javi ha vuelto a demostrar que está al nivel de los mejores del campeonato, siendo la mala fortuna y los fallos mecánicos las únicas causas que le han impedido lograr los resultados que merece por su rapidez y profesionalidad.
Javi Villa comentó tras la prueba que "una carrera no la gana uno sólo, influyen muchos factores. De cuatro carreras que llevamos, en tres de ellas hemos tenido problemas: en una se rompió el motor, ayer se para el coche cuando íbamos terceros, lo que evidentemente fue mala suerte, y hoy, ya antes de ponerse el semáforo en verde se nos queda el motor en siete cilindros, cosa que ya había pasado también el viernes y que volvió a ocurrir después de la parada en boxes. Eramos rápidos, a la vuelta rápida no se pudo llegar porque los mejores cronos se hicieron al principio, cuando estábamos en boxes, pero después de la segunda parada, a no ser las vueltas en las que cogí tráfico para ir desdoblándome, en el resto teníamos un ritmo tan rápido o mejor que la cabeza de carrera, el ritmo que tenemos que tener como se vio en la única carrera en la que no falló nada,en la que saliendo desde atrás hicimos podio y estuvimos a punto de ganar".