Las provincias de Castilla y León mantienen su alerta ante la crecida de los caudales que se están produciendo en los ríos de la comunidad debido a las lluvias y al aumento de las temperaturas y el consecuente deshielo.
A lo largo de la noche se han recibido numerosas llamadas relacionadas con el desbordamiento de ríos y arroyos en la Comunidad.
La mayor parte de los incidentes estaban relacionados con cortes de carreteras secundarias e inundaciones puntuales en zonas deshabitadas o en desuso.
Las incidencias más destacables se han producido en las provincias de Burgos y de Soria.
En Aranda de Duero (Burgos), los bomberos han tenido que evacuar a cuatro adultos y un niño que se encontraban incomunicados en una vivienda por el desbordamiento del arroyo de Bañuelos. Los servicios de emergencia los trasladaron a la vivienda que tenía en la ciudad.
Los desbordamientos de los cauces de los ríos también provocaron la inundación de los bajos de un hotel situado en la localidad burgalesa de Careluega.
En El Burgo de Osma (Soria) los bomberos continúan trabajando para solventar los problemas producidos por el desbordamiento del río Ucero. Una de las incidencias más graves en esta localidad ha sido la inundación de unas 20 cocheras en la calle Juan Carlos I.
En estos momentos todas las incidencias están siendo solucionadas aunque se mantiene la alerta por si volvieran a registrarse más incidentes ya que los caudales siguen estando altos.
