El rescate de los bancos chipriotas no debería hacerse con cargo a los ciudadanos de a pie, reclama un Parlamento Europeo muy crítico con la propuesta original del Eurogrupo que contemplaba una tasa sobre todos los depósitos bancarios. Mientras Nicosia trabaja en un plan alternativo, el Presidente de la Eurocámara, Martin Schulz, subrayó que "la prioridad del Parlamento es garantizar a las personas que depositaron su dinero en sus cuentas bancarias que lo recuperarán".

Los líderes de los grupos parlamentarios del Partido Popular Europeo, Socialistas y Demócratas, Demócratas y Liberales, Verdes y Alianza Libre Europea, y Conservadores y Reformistas reclamaron que no se grave con ningún tipo de impuesto extraordinario los depósitos inferiores a 100.000 euros. El Presidente de la Eurocámara, Martin Schulz, afirmó por su parte, que "la Conferencia de Presidentes está profundamente preocupada y defiende que los depósitos de menos de 100.000 euros deberían quedar exentos de toda tasa". Schulz exigió que "se encuentre una solución más justa y sostenible para el pueblo chipriota". Añadió que "necesitamos una solución europea, no externa". Y apostilló: "Los ahorros de los ciudadanos de a pie no deben usarse para rescatar a la banca".

Los líderes de los grupos políticos de la Eurocámara también criticaron la "falta de transparencia y de control democrático" de la solución inicialmente propuesta por el Eurogrupo: el Consejo de Ministros de Economía y Finanzas de los diecisiete Estados que comparten el euro como moneda única. Y Schulz lamentó que "la solución propuesta fuera adoptada a puerta cerrada y de madrugada, sin una verdadera reflexión sobre sus consecuencias para los ciudadanos".

Los eurodiputados se mostraron también muy críticos cuando el jueves compareció ante la comisión parlamentaria de Asuntos Económicos y Monetarios el ministro holandés de Finanzas, Jeroen Dijsselbloem, en su calidad de nuevo Presidente del Eurogrupo. Los parlamentarios atacaron el plan de imponer una tasa sobre los pequeños ahorradores y la gestión de la situación.

Por su parte, Dijsselbloem replicó que "debe quedar claro que el Eurogrupo considera que los pequeños y los grandes ahorradores deberían recibir un trato diferente". Subrayó que hay que "defender la integridad de la zona euro". Y afirmó que "debemos superar los debates sobre si es un riesgo sistémico o si debemos actuar, y decir de inmediato lo que vamos a hacer para atajarlo".