Madrid,. El Presidente de Banco Santander, Emilio Botín, ha presidido hoy la junta general de accionistas de la entidad en la que se han aprobado las cuentas correspondientes a 2012 y la integración de Banesto y Banif. Botín recordó que el resultado del pasado ejercicio (2.205 millones de euros de beneficio atribuido, un 59% menos que el año anterior) “se ha visto condicionado de forma determinante por el extraordinario nivel de provisiones y saneamientos especiales realizados en España, que han alcanzado la cifra de 6.140 millones de euros, solamente compensados en parte por los 1.241 millones de plusvalías extraordinarias” y destacó que “con las provisiones realizadas en 2012 queda completado el saneamiento inmobiliario en España”.
Perspectivas 2013
Botín centró la última parte de su intervención en las perspectivas para 2013. “Las tendencias serán, en general, similares a las de 2012: las economías emergentes van a continuar su etapa de crecimiento y Europa aún tardará en dar signos de recuperación, al menos durante la primera parte del año”, dijo Botín. Mostró su confianza en Brasil y México, “dos países claves para el Banco: en menos de ocho años tendrán más población que toda la zona euro”. En cuanto a Europa, señaló que “se han sentado las bases para una mayor integración que permitirá solventar las carencias institucionales del euro”. Destacó el avance que ha supuesto la decisión de estudiar una hoja de ruta para completar la unión bancaria con una unión económica, fiscal, financiera y política e impulsar la unión bancaria europea con la creación de un mecanismo de supervisión único; así como “el papel clave y determinante en la gestión de la crisis” que han jugado las medidas del Banco Central Europeo.
Sobre España, señaló que las perspectivas empiezan a ser más positivas. “La economía española ha entrado en una nueva fase cuyos frutos comenzarán a manifestarse en la segunda mitad del año y, de forma más evidente, en 2014”, apuntó. Además, destacó que “se ha producido un profundo avance en la corrección de desequilibrios, fundamentalmente porque el Gobierno ha adoptado medidas muy valientes y necesarias para superar la crisis y sentar las bases de una nueva etapa de bonanza”: la reforma laboral, la reducción del déficit público, y la reestructuración del sector financiero. Respecto a esta última, aseguró que “ha entrado en su fase definitiva”. “El calendario de la reforma es claro, los planes son adecuados y tengo plena confianza en que, gracias a las medidas adoptadas, nuestro sistema financiero contará con una dimensión adecuada y será el más solvente y eficiente: el más sólido de Europa”.
“Las últimas medidas del Gobierno dirigidas a apoyar a las pequeñas y medianas empresas, al emprendimiento y la iniciativa empresarial y el empleo, anunciadas en el debate del Estado de la Nación por el Presidente del Gobierno, son también muy necesarias”. Botín calificó de “enorme esfuerzo” los ajustes de costes y la mejora de productividad llevados a cabo por las empresas españolas en los últimos cuatro años que “no tienen comparación en Europa” y la búsqueda de nuevos mercados, que ha permitido una fuerte mejora de las cuentas externas. “Hay mucho por hacer, pero ya somos un país competitivo y con capacidad de crecer, y contamos con un tejido empresarias y un capital humano que situarán a nuestra economía en una nueva etapa de expansión. La convicción de que el euro no se rompe, unida a los evidentes avances en las reformas y al esfuerzo del sector privado, se está traduciendo en una mejora clara de la percepción de España en el exterior. Esta positiva evolución no debe hacernos bajar la guardia ni en Europa, ni en España, ni a las autoridades ni al sector privado. Hay que ser ambiciosos y continuar con las reformas que posicionen a España con ventaja para competir con el resto del mundo”.
Por último, Botín enumeró los objetivos del Banco para 2013:
- “En primer lugar, y una vez terminados los saneamientos inmobiliarios en España, volver a la senda creciente de beneficios de Grupo Santander.
- En segundo lugar, mantener una fuerte posición de liquidez y capital.
- En tercer lugar, ejecutar de forma excelente las integraciones que tenemos en curso en España y en Polonia.
- En cuarto lugar, mantener la retribución a nuestros accionistas en 0,60 euros por acción por quinto año consecutivo”.
“Vemos el futuro con optimismo, porque aunque los próximos trimestres serán duros en España, tenemos la confianza de que estamos cerca de un cambio de ciclo. En 2012 el beneficio de nuestro Banco ha marcado un punto de inflexión y en 2013, una vez terminados los saneamientos inmobiliarios, veremos un fuerte aumento de resultados”, concluyó.