- Imitaban estos prestigiosos portales para ofertar inexistentes aparatos tecnológicos de última generación y otros objetos a precios muy ventajosos con la finalidad de captar la atención de sus potenciales víctimas
- Copiaban igualmente la apariencia de la pasarela de pago de forma que, mediante técnicas de phishing, los compradores que habían caído en el engaño ingresaban el importe del producto en una de las múltiples cuentas bancarias abiertas por los miembros de la red
- Entre los 11 arrestados están el responsable de la trama, un abogado que presuntamente participaba en las actividades delictivas del grupo, y diversos colaboradores encargados de realizar los trámites bancarios donde recibían el dinero fraudulento a cambio de una comisión
- Se han realizado cinco registros en Tarragona –desde donde operaba la trama- e intervenido material para falsificar documentos así como abundante documentación que acredita el envío fuera de España del dinero obtenido con los fraudes, entre otros efectos
Redacción- Agentes de la Policía Nacional han desarticulado una organización que suplantó conocidas web de compraventa y pago online con las que defraudó más de 400.000 euros. Los detenidos imitaban estos prestigiosos portales para ofertar inexistentes aparatos tecnológicos de última generación y otros objetos a precios muy ventajosos con la finalidad de captar la atención de sus potenciales víctimas. Además, copiaban igualmente la apariencia de la pasarela de pago de forma que, mediante técnicas de phishing, los compradores que habían caído en el engaño ingresaban el importe del producto en una de las múltiples cuentas bancarias abiertas por los miembros de la red con identidades falsas. Han sido arrestadas 11 personas en Tarragona –desde donde operaba la trama-, entre ellas el responsable de la trama, un abogado que presuntamente participaba en las actividades delictivas del grupo, y diversos colaboradores encargados de realizar los trámites bancarios donde recibían el dinero fraudulento a cambio de una comisión. Se han realizado cinco registros en Cambrils, Reus y Tarragona e intervenido material para falsificar documentos así como abundante documentación que acredita el envío fuera de España del dinero obtenido con los fraudes, entre otros efectos.
Abrían cuentas bancarias con documentos falsos
Las primeras investigaciones comenzaron tras detectar un elevado número de solicitudes de Certificados de Registro de Ciudadano de la Unión, que estaban siendo presentadas por nacionales rumanos con documentación falsa, en diversas comisarías de policía de Reus, Tortosa y Tarragona. Posteriormente los investigadores lograron establecer las relaciones personales existentes entre ellos así como determinar que se trataba de un entramado especializado en cometer estafas a través de Internet.
Utilizando documentación falsa y, a través del portal telemático de la Seguridad Social, los miembros de la red se inscribían como autónomos en el Régimen de la Seguridad social, requisito imprescindible para obtener el Certificado de Ciudadano de la Unión y para poder abrir una cuenta bancaria.
Después se desplazaban por las provincias de Tarragona, Barcelona y Lleida, abriendo numerosas cuentas bancarias. Para ello utilizaban diferentes filiaciones reales – incluso de personas fallecidas-, con el fin de camuflar su verdadera identidad y multiplicar el número de estafas, así como las ganancias obtenidas, lo cual dificultó enormemente la investigación policial. En el transcurso de las investigaciones, se han podido detectar al menos 78 cuentas bancarias abiertas por esta organización en toda la Comunidad Autónoma de Cataluña.
Imitaban conocidas páginas web de compraventa
A continuación, confeccionaban y duplicaban conocidos portales de venta de artículos entre particulares en los que ponían a la venta, de manera ficticia, aparatos tecnológicos de última generación a precios muy inferiores a los de mercado, ofertas que eran difundidas mediante técnicas de ingeniería social. Con ello lograban engañar a los internautas que, en la creencia de que estaban en las páginas originales así como en las pasarelas de pago auténticas, realizaban sin saberlo transferencias a las cuentas bancarias que los miembros de la organización previamente habían abierto.
Cuando las víctimas se daban cuenta del engaño, denunciaban lo ocurrido o interponían reclamaciones a los verdaderos portales de Internet, quienes a su vez daban cuenta de los hechos a la Policía. De este modo se pudo relacionar las múltiples denuncias por estafa presentadas – hay contabilizadas cerca de 600 en nuestro país - y relacionarlas con este grupo delincuencial. Con los datos obtenidos los investigadores estiman en cerca de 1.000 las víctimas de esta organización tan sólo en nuestro país, a las que habría que sumar las que hay en otros países de las que se desconoce el número.
El principal líder de la organización contaba con personas de total confianza que se encargaban de realizar los trámites bancarios y administrativos, conocidos policialmente como "muleros", que recibían a cambio una comisión por cada operación.
En caso de que las entidades bancarias descubriesen la falsedad de la documentación utilizada para abrir las cuentas bancarias, procedían a bloquearlas. En este momento un abogado de nacionalidad española, que colaboraba con el grupo desarticulado, lograba desbloquearlas empleando para ello poderes notariales que había conseguido anteriormente induciendo a error a notarios de la provincia de Tarragona. De esta forma, eran retirados los fondos depositados en las mismas por sus víctimas.
Todos los beneficios obtenidos a través de estas actividades ilícitas eran sacados de nuestro país mediante envíos de dinero realizados por distintas personas y a través de varias empresas dedicadas a tal fin, lo que ha dificultado aún más el trabajo de los agentes.
Once detenidos y cinco registros
Las investigaciones realizadas por la Policía Nacional, en colaboración de las Autoridades rumanas, permitieron identificar a todos los miembros de la organización criminal. El operativo policial concluyó con el arresto de 11 personas –en su mayoría originarios de la ciudad rumana de Rimnicu Vilcea- en la provincia de Tarragona y la realización de cinco registros en los domicilios de los investigados. Se ha intervenido numeroso material informático para la falsificación de documentos, terminales de telefonía móvil y documentación referente a los envíos de dinero al extranjero, libretas de ahorro a nombre de los detenidos y resguardos de envío de dinero, entre otros efectos.
Para evitar ser víctima de phishing es necesario hacer un uso racional de las redes sociales. Para ello, es importante asegurarse y nunca dar por supuesto que el interlocutor vía Web, correo electrónico o red social es quien dice ser, ni aunque sea a través de la cuenta de un "amigo", ya que puede haber sido secuestrada a través de ingeniería social. También se debe desconfiar de supuestos archivos muy atractivos, frases breves en perfiles de redes sociales o cuentas de correos conocidas o no con frases muy breves, atrayentes y links acortados. Cuando se realicen compras en Internet hay que ser especialmente precavido con ofertas de fuente desconocida, a un precio excesivamente barato o demasiado ventajoso respecto a la media del mercado.
La operación policial ha sido llevada a cabo por el Grupo VII de la Brigada Central contra la Trata de Seres Humanos de la Comisaría General de Extranjería y Fronteras junto con la UCRIF de la Comisaría Provincial de Tarragona y el Grupo de Policía Judicial de Reus (Tarragona), con la colaboración de la Unidad de Intervención Policial de Barcelona, la Brigada Provincial de Seguridad y Protección de Tarragona, la Brigada Local de Seguridad y Protección de Reus, así como la Agregaduría de Interior de la Embajada de Rumania en España.