Economía/AM.-Una de las primeras medidas que tomó el Gobierno presidido por Mariano Rajoy fue la de penalizar la contratación de los mayores de 50 años, retirando la bonificación de cotización por la empresa que existía hasta entonces y elevando en la práctica tanto el coste de un contrato a un trabajador mayor que en la práctica lo hace inasumible, máxime habiendo millones de jóvenes en el mercado a los que contratar por minisalarios. Ahora, según informa hoy el diario EL PAÍS, el Consejo de Ministros tiene en su mesa un nuevo golpe mortal a este colectivo, expulsando del subsidio de desempleo a aquellos que vivan con un conyuge o un hijo que cobre más de 900 euros. Es decir, tras expulsarlos del mercado laboral, hoy puede coronar la medida retirándoles la mínima protección social de unos 450 euros que podían percibir los parados de larga duración mayores de 55 años hasta el momento. Salvo que el Santo Padre ejerza un benéfico efecto sobre tan cristiano Ejecutivo y se retire esta medida a última hora, el despropósito y la consiguiente tragedia humana de miles de españoles y españolas será perpetrado.