El Secretario General de la ONU acogió con beneplácito el acuerdo firmado hoy en Addis Abeba, Etiopía, entre el gobierno de Sudán y el Movimiento Popular de Liberación de Sudán (SPLM-sector norte) según el cual el ejército nacional integrará a sus filas a miembros de este grupo rebelde.
En un comunicado, Ban Ki-moon encomió a ambas partes por la voluntad política demostrada y las urgió a aprovechar este ímpetu para implementar de inmediato el cese de hostilidades en el estado de Kordofan del Sur.
Del mismo modo, Ban instó a las partes a garantizar la protección de los civiles vulnerables y a permitir el acceso sin restricciones de la asistencia humanitaria para la población necesitada en la región.
El acuerdo de hoy también estipula el alto el fuego entre el Movimiento Popular firmante y el Partido de la Conferencia Nacional en el Nilo Azul y Kordofan del Sur, los estados de la frontera que divide al norte y sur del país, donde se ha registrado una oleada reciente de enfrentamientos que ha causado el desplazamiento de más de 70.000 civiles.
El Movimiento Popular de Liberación de Sudán luchó contra el gobierno de Khartoum por la independencia del sur del país durante más de veinte años, pero es un grupo de la zona norte sudanesa y ahora se convertirá en un grupo político legal, mientras que Sudán del Sur será un nuevo Estado a partir del 9 de julio.
riesgo de nueva guerra entre norte y sur de Sudán
La alta comisionada adjunta de la ONU para los Derechos Humanos advirtió hoy que la escalada de tensión en la región fronteriza entre el norte y el sur de Sudán podría degenerar en una nueva guerra.
En conferencia de prensa en Ginebra tras una visita a ese país, Kyung-wha Kang dijo que los enfrentamientos en la región petrolera de Abyei y el estado de Kordofan del Sur podrían extenderse y urgió a ponerle fin inmediatamente.
Kang recordó que esta violencia ha costado más de 1.400 vidas en lo que va del año.
Agregó que Sudán del Sur, que será un Estado independiente a partir del 9 de julio, deberá crear una fuerza militar disciplinada que tenga como tarea principal proteger a los civiles.
La experta afirmó que la comunidad internacional no puede permitir que el conflicto se extienda y consideró irrelevante quién haya comenzado las hostilidades.
Por otra parte, Kang reiteró el llamamiento de la ONU a permitir el acceso irrestricto a la asistencia humanitaria a la regió