ONU.-La comunidad internacional debe actuar unida para encontrar una solución política y poner fin al baño de sangre en Siria, que hasta el momento ha costado la vida de más de 70.000 personas y provocado el desplazamiento masivo de la población.
Así lo sostuvieron hoy el Secretario General de Naciones Unidas, Ban Ki-moon, y el representante de la ONU y la Liga de Estados Árabes para Siria, Lakhdar Brahimi.
En un encuentro celebrado en Mt. Pelerin, Suiza, ambos expresaron profunda frustración por el fracaso de la comunidad internacional para encontrar una solución al conflicto en ese país de Medio Oriente.
También lamentaron que, tanto las fuerzas del Gobierno como de la oposición, sean tan imprudentes en cuanto al impacto que han tenido los enfrentamientos armados en la población civil.
En ese sentido, Ban y Brahimi subrayaron la responsabilidad de ambas partes de responder ante posibles crímenes de guerra y de lesa humanidad.
Finalmente, señalaron que Naciones Unidas está preparada para facilitar un diálogo que solucione el conflicto sirio, en el caso de que el Gobierno y la oposición decidan entablarlo.