Miles de personas salen a la calles en 50 ciudades españolas para apoyar el derecho a la vivienda, el fin de los desahucios, la dación en pago retroactiva y los alquileres sociales promovido por la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH)
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De Colón a Sol era el recorrido inicial. Han sido muchos y de varias edades los manifestantes así como los lemas de algunas de sus pancartas, aunque el objetivo común era claro: el derecho a la vivienda, el fin de los desahucios, la dación en pago retroactiva y los alquileres sociales.
Los manifestantes, muchos con los que ha podido hablar Periodismo Humano, no estaban afectados por los desahucios. Ni ellos, ni sus familiares más cercanos. Es el caso de Jaime Turonzas de 18 años de edad que ha acudido sólo a la manifestación: “es que aquí en Madrid no tengo a nadie”, se justificaba. Con nadie se refería a nadie cercano. Estudiante de Ingeniería industrial y procedente de Palma de Mallorca. “Vengo porque el hecho de que haya personas que se están quitando la vida me parece un problema muy importante actualmente y aunque en mi familia no hay nadie afectado, afortunadamente, este es un problema que nos afecta a todos. Eso no quita que apreciemos lo que tenemos, pero hay que ser conscientes de que la gente lo está pasando mal, para tratar de evitarlo”. Esto es lo que Jaime comentaba en el trayecto de la manifestación que transcurría por la calle Alcalá, casi llegando a Sol.
Antes ha habido momentos para la indignación, cuando frente al edificio en el que se encuentra el despacho de la alcaldesa de Madrid, Ana Botella, se ha pedido su dimisión y y se le ha gritado “vergüenza”. O desde el propio arranque de la manifestación en Colón, en el que ya se presentía que lo lemas lanzados al aire iban a ser duros tales como “no son suicidios, son asesinatos” o “¿a cuántos más, vais a asesinar?”.
“Yo vengo a esta manifestación para apoyar a la gente que se está quedando sin hogar”, comentaba Elena Soria de Madrid. “Es fundamental que la gente que menos tiene no pague esta crisis y que los bancos no se vayan de rositas”. Lo comentaba en Sol y previamente a que los políticos socialistas Juan Fernando López Aguilar y Beatriz Talegón hayan sido abucheados y zarandeados por numerosos participantes, motivo por el que se han visto obligados a abandonar la marcha escoltados por la Policía. Betraiz Talegón con lágrimas en los ojos incluidas. Ambos cargos se habían incorporado en la última parte del recorrido, pero no han pasado desapercibidos para los manifestantes.
Los afectados por las participaciones preferentes también se han hecho notar ya que su participación ha sido masiva, y puesto que para ellos, tal y como explicaba uno de los afectados, “todo es lo mismo, la estafa bancaria a la que nos tienen sometidos”.
Diego y su novia Melisa de 24 años de edad, sin embargo, lo veían desde otra perspectiva. Ambos nacidos y residentes en suiza, pero de padres de procedencia española, los hemos encontrado completamente integrados con los manifestantes en Sol y eso que estaban en Madrid de vacaciones. “Me da mucha pena lo que está pasando con España”, decía Diego. “Nosotros vivimos en Suiza, pero mis padres y hermanos que ya volvieron para España lo están pasando mal porque tienen negocios y tal y como están las cosas…”. Su acento gallego no podía negar su origen, pero el francés que hablaba cada vez que se dirigía a su novia, ella también de origen español nacida en suiza, denotaba su integración en el país en el que el destino, y la necesidad de sus padres, les obligó a adoptar como propio. “Yo no me vuelvo a España ni loco ahora”, comentaba Diego. “En Suiza el salario básico está entre 3.500 y 4.000 euros”. Cuando se le pregunta cómo se ve la imagen de España en Suiza no duda ni un instante en decir que allí saben perfectamente lo que está sucediendo en España, “lo que pasa es que por respeto no te lo comentan mucho”.
Cerca de Jaime y Melisa unos manifestantes españoles prácticamente de la misma edad que ellos, trataban de hacerle entender a otros jóvenes italianos que en España si el banco te quitaba la casa no es suficiente, tienes que seguir pagando la hipoteca. “Debido a que eso nos parece injusto es por lo que estamos aquí hoy”, recalcaba uno de ellos.
Tras un breve rato en Sol, sobre las 20:30, un grupo de apenas 100 manifestantes han decidido marchar al Congreso, completamente blindado por los cuatro costados por la policía, hecho que ha propiciado que su rumbo cambiara hacia la calle Génova, sede del Gobierno. Por el camino han tomado parte de la Gran Vía, como ya viene ocurriendo en anteriores manifestaciones, invitando a la gente de los vehículos a unirse a la marcha.
Una vez en la calle Huertas han tenido que desistir en el intento de llegar a Génova, debido a que la policía los ha acorralado identificando a algunos de ellos, mientras otros, trataban de negociar que les dejaran pasar bajo la argumentación “mañana puede ser uno de tu familia quien se quede sin casa”. Con buenos modales la policía les ha explicado que el itinerario que habían decidido tomar ya no era el estrictamente estipulado, y por tanto el establecido por legalidad, y que si no lo abandonaban serían sancionados por ello. Al final, los manifestantes han decidido desistir.
En un manifiesto en su web, la PAH señala que “continúa caminando” para defender y exigir el derecho a la vivienda, porque, a su juicio, en España está “vulnerado”. Denunciar también la situación “dramática” a la que “se les condena a vivir a miles de familias que no pueden pagar la hipoteca o el alquiler.
Califica la situación de “grave” y “urgente” y reitera que la ley actual es “injusta” porque toda la responsabilidad recae “sobre la parte más vulnerable”, mientras que el Gobierno destina “miles de millones de euros en ayudas públicas a la banca sin ningún tipo de contraprestación”.
La manifestación de Asturias se convocó en Gijón donde los participantes recorrieron las calles del centro de la ciudad con gritos de apoyo a la PAH, contra los desahucios, los bancos y el gobierno.