- La especialista del movimiento Cinema 16, iniciado en Estados Unidos en 1947 durante los comienzos de la época beat, ofreció una entrevista sobre el programa que ofrecerá en Ambulante Gira de Documentales 2013
En entrevista, Geritz afirmó que Cinema 16 es un movimiento en oposición al cine establecido, tanto en formatos, temáticas como en las maneras de producción, siendo en sus inicios un refugio para las cintas de 16 milímetros que se producían de manera más barata que las de 35 milímetros.
"En esa época el 16 mm era un formato más accesible, que rápidamente fue adoptado como la bandera del cine independiente. En sus comienzos Cinema 16 presentaba cualquier tipo de películas: acerca de la naturaleza, sobre psicología, temas sociales, todas realizadas con presupuestos muy limitados, sin embargo, tenían la característica de tener una gran sensibilidad, profundidad, además de lenguajes muy vanguardistas".
Recordó que entre 1947 y 1963, el experimento de Cinema 16 coincidió con el inicio del movimiento beat en los Estados Unidos, cuando había una gran curiosidad por la experimentación y por ello las propuestas de Amos Vogel, quien era ayudado por su esposa Marcia, atraían a un público muy numeroso.
"A veces una sola cinta se proyectaba hasta 15 veces en un día, era una época en la que las personas estaban muy abiertas a nuevas propuestas y recomendaban las funciones a sus amigos y vecinos. A Vogel le gustaba mezclar películas de diversos temas en un solo día, casi todas caracterizadas por sus temáticas sorpresivas e inesperadas".
Dijo que muchos de esos filmes se adelantaron a su época y marcaron pautas estéticas y temáticas que fueron retomadas por otros cineastas pertenecientes al stablishment, de ahí que los programas fueran tan vistos por artistas emergentes y pronto cobraran, junto con los filmes, cualidades icónicas.
"Las personas sabían que cuando acudieran a Cinema 16 iban a encontrar algo que los iba a cimbrar desde los cimientos de su ser. Lo que Amos Vogel buscaba era precisamente eso, que la audiencia transformara su mentalidad sobre el mundo, de hecho su personalidad era muy explosiva, porque él había sobrevivido en Europa a los horrores de los nazis y por ello, afirmaba que su medio de cambiar al mundo era el cine".
Los cinco programas de Cinema 16 que enriquecerán la programación de Ambulante, llevan por títulos: Películas favoritas del público, La ciudad que vio nacer a Cinema 16, El cine como arte subversivo, Seducciones y Cine en primera persona.
Entre los títulos, destacó Fuegos Artificiales, de Kenneth Anger, filme realizado en 1947 y que aborda tempranamente el tema del sadomasoquismo, así como La colección de Florestine, de Helen Hill, en torno a las consecuencias sicológicas que dejó la devastación del Huracán Catrina.
Otros filmes que engalanan el programa son La isla de los 24 dólares (1926); La vida privada de un gato (1947), de Maya Deren; La Habitación (1959), de Carmen DAvalo; La cama (1968), de James Broughton; Radicales Libres (1979), de Len Lye e Hijas del caos (1980), de Marjorie Keller, entre otros.
"Nos sentimos muy orgullosos de poder difundir estos filmes en México dentro de una gira como Ambulante que sigue exactamente el mismo espíritu de Cinema 16 y que en esta edición, tiene precisamente los lineamientos Descubrir, Compartir, Transformar, sin duda muchas de estas películas van a interesar mucho al público de este país por su vigencia".
Finalmente, comentó que aunque los tiempos han cambiado y muchos de estos filmes ya no son tan perseguidos por la censura, si van a dejar un gran impacto entre el público.
“Como promotor de propuestas tan innovadoras, Vogel se enfrentó a la censura muchas veces, por lo que tuvo que utilizar diversos mecanismos para burlarla, uno de ellos fue crear una membresía con la que los adeptos podían acudir a las funciones como a un club privado, afortunadamente existe hoy una mayor apertura”.
Y añadió: “Como lo hemos dicho antes, en el concepto de Cinema 16 hay películas que exigen estados de contemplación e inquietud en su público, pero que al mismo tiempo reinventan la relación del cine con la narrativa, el realismo, el ilusionismo y todos esos ingredientes que hacen del cine una ventana a otros mundos”, concluyó Kathy Geritz.
