La Fundación Secretariado Gitano (FSG) ha presentado hoy en Madrid su informe anual ‘Discriminación y comunidad gitana’. En esta octava edición se recogen 148 casos recopilados durante el año 2011 a través de los 60 centros de asistencia a víctimas de discriminación con que cuenta la FSG en toda España.

En este acto, que tuvo lugar en la sede de la Secretaría de Estado de Servicios Sociales e Igualdad, además de la presentación de los principales datos y conclusiones del Informe se celebró un desayuno con periodistas para debatir sobre el papel de los medios de comunicación en la discriminación, habida cuenta de que en el Informe presentado, el 53% de los casos identifican como ‘agente discriminador’ a los medios de comunicación.

En el acto inaugural intervinieron Carmen Plaza, Directora General para la Igualdad de Oportunidades del MSSSI; Mª Dolores Ruiz, Subdirectora General de Programas Sociales del mismo Ministerio e Isidro Rodríguez, Director de la FSG.

El director del Secretariado destacó cómo los casos recogidos afectan a derechos básicos y la vida de las personas; señaló el papel de la crisis que continúa “golpeando a los más vulnerables” y provocando un crecimiento de la discriminación racial.

Carmen Plaza, por su parte, incidió en el papel de los medios de comunicación en este contexto y comentó que, entre otras iniciativas, desde su Dirección General se está elaborando un Mapa de la discriminación en España y se está reactivando la Red de asistencia a víctimas.

Dolores Ruiz destacó que este sea el octavo Informe que elabora la FSG con la subvención del Ministerio, ya que esta continuidad “aporta información para orientar las políticas” e hizo referencia a la Estrategia Nacional de Inclusión de la Población Gitana que tiene también entre sus cometidos velar por la no discriminación.

La presentación de datos y conclusiones del Informe[1] corrió a cargo de la abogada gitana Sara Giménez, responsable del Área de Igualdad de la FSG, quien hizo especial hincapié en el aumento de la gitanofobia en internet, en concreto en el aumento y la peligrosidad de los comentarios racistas que acompañan a las noticias sobre la comunidad gitana. Otros ámbitos especialmente sensibles son los de la discriminación en el Empleo y en la Vivienda. En el primero, se contabilizaron el 11% de los casos registrados, con graves consecuencias al condenar a muchos gitanos a la exclusión por “tener apellidos gitanos”. Respecto a la Vivienda, denunció las dificultades para acceder a una vivienda, tanto en el acceso al alquiler como a la compra.

En el debate participaron representantes de entidades sociales, medios de comunicación, juristas, asociaciones gitanas y la administración a fin de comentar algunos aspectos del papel de los medios en la discriminación de la comunidad gitana. Fue introducido por Emilio de Benito, periodista de El País y Fernando Rey, Catedrático de Derecho Constitucional y director de Comunicación de la Universidad de Valladolid.

Emilio de Benito abogó por que “los periodistas no contribuyamos a aumentar la discriminación y el estigma”, aunque les restó responsabilidad porque “la discriminación ya existía antes que los medios”. Fernando Rey reclamó la completa transposición de la Directiva que obliga a todos los países de la UE a contar con un organismo de igualdad de trato “que sería muy eficaz para estos casos”.

En el animado debate entre periodistas y otros agentes sociales vinculados a la lucha contra la discriminación, se tocaron temas como la objetividad de los medios, el espectáculo frente a la información, las noticias y los comentarios de los lectores en Internet, la precariedad actual de los medios, la proactividad de las organizaciones o la invisibilidad de los gitanos no marginales.

También se introdujo un elemento de actualidad vinculado con esta temática, por la emisión la noche anterior, en el prime time de la cadena Cuatro, de un nuevo programa titulado Palabra de gitano. Esta docuserie, confirmando los presagios de la FSG, se ha centrado en mostrar con una total falta de pudor, aspectos morbosos y estereotipados sobre los gitanos en vez de ofrecer una imagen más real recogiendo los esfuerzos y avances de la comunidad gitana española[1].

A este respecto, el director de la FSG comentó que el programa “no fue inocente y al mismo tiempo hace mucho daño, ya que cristaliza una mirada sobre los gitanos, sobre el pañuelo, sobre el machismo… con efectos perniciosos y muy duraderos.”

En la Clausura del acto intervinieron Fernando Rey, como Patrono de la Fundación, quien insistió en que los medios no pueden ni deben ser indiferentes ante la discriminación, e Ignacio Sola, Subdirector General para la Igualdad de Trato y no Discriminación quien pidió a los medios que “contribuyan a romper este círculo vicioso” y recordó un reciente estudio de una universidad norteamericana que concluía que Barack Obama no habría llegado a la presidencia si el cine y la televisión no hubieran sacado antes un presidente negro.