FORO demuestra su apoyo a la labor de ADEPAS, que está haciendo un trabajo fantástico en la integración de los deficientes psíquicos”
- “Vamos a ayudar en la búsqueda de salidas a la situación de bloqueo administrativo”
- “Hay que tranquilizar a las familias y trabajadores de la institución, no podemos tolerar que un malentendido burocrático ponga en peligro la continuidad del centro”
Noreña.- El Presidente de FORO, Francisco Álvarez-Cascos, se reunió esta mañana, al frente de una amplia delegación de FORO, con la directiva de la Asociación pro Ayuda a Deficientes Psíquicos del Principado de Asturias (ADEPAS) en las instalaciones de su Centro Ocupacional de Noreña. Al término del encuentro, Álvarez-Cascos ha manifestado que “si un convenio no soluciona, sino que impide una ejemplar colaboración público-privada como la de ADEPAS, el Principado tiene que cambiar la norma, antes que destruir una gran obra social”.
“Esta visita a la directiva del Centro que ADEPAS tiene en Noreña –explicó Álvarez-Cascos– se hace en primer lugar para demostrar nuestro apoyo a la labor que están haciendo. ADEPAS está haciendo un trabajo fantástico. Es la institución asturiana más antigua que se dedica a la integración de los deficientes psíquicos con unos resultados que solo pueden calificarse como excelentes. Las 70 familias usuarias lo saben bien y el apoyo generalizado de toda la comunidad en estas últimas semanas lo demuestran. Nosotros nos sumamos a ese apoyo”.
Añadió el Presidente de FORO que, “en segundo lugar, queremos colaborar; sin figurar y sin molestar. Queremos ayudar en la búsqueda de salidas a la situación de bloqueo administrativo en la que está atrapada ADEPAS. Como es sabido, este año la Consejería de Bienestar Social planteó un nuevo sistema de concesión de ayudas para los próximos cuatro años. Por una rigidez del procedimiento y por un error –en nuestra opinión menor y totalmente subsanable– en la presentación de dos documentos, ADEPAS quedó fuera del convenio. Todo esto es conocido desde el verano pasado y llama la atención la poca diligencia por parte de los responsables públicos en buscar una solución a un problema burocrático. Existen vías para arreglarlo y nosotros nos brindamos a colaborar poniendo a su disposición todos nuestros medios humanos y materiales”.
Por último, Álvarez-Cascos afirmó que “queremos tranquilizar a las familias y a los trabajadores de esta institución. No podemos tolerar que un malentendido burocrático ponga en peligro la continuidad de este centro. Ni las familias ni los usuarios ni los trabajadores se merecen el trato tan insensible que están recibiendo. La Consejería debería dar la cara y, como mínimo, comunicar por escrito que la amenaza de traslado no se va a realizar. Y que las buenas palabras se van a transformar en hechos”.