En consonancia con el tema de fondo, el 21 de junio ofreció un menú completo que comenzó con la votación en la comisión de Agricultura y Desarrollo Rural del informe de la calidad de los alimentos, y acabó con un turno de preguntas de periodistas y de nuestros lectores. Asimismo, los eurodiputados debatieron las próximas votaciones de los informes sobre etiquetado de alimentos y organismos modificados genéticamente. También hubo espacio para la promoción de la comida regional.
En el informe sobre etiquetado, los eurodiputados de la comisión parlamentaria de Agricultura subrayan que si la Unión Europea pretende competir con terceros países, se debe facilitar a los productores el registro del etiquetado de calidad. En un debate sobre el tema en la página de Facebook de Parlamento Europeo, el eurodiputado sueco Carl Schlyter, del grupo de Los Verdes, reconoció que "No existe la etiqueta ideal, es distinta para consumidor", aunque él apostaría por aquel que aportara la información necesaria para facilitar la elección del consumidor y le permitiera discernir los alimentos falsificados del resto. "Como por ejemplo un yogur de fresa que realmente no contiene fresa", sentenció.
En este sentido, el informe acorta los plazos de la Comisión para responder a las solicitudes sobre el etiquetado de calidad, que pasa así de doce a seis meses. El documento también supone una mejora para los productores de alimentos a la hora de proteger y promocionar sus productos. No obstante, la votación del informe sobre el etiquetado deberá esperar a la segunda sesión plenaria que celebrará el Parlamento Europeo en septiembre. No así el de la calidad de los alimentos y los organismos modificados genéticamente, que se someterá a votación ya en julio.
Entender las etiquetas
En las preguntas que nos hicieron llegar a través de Facebook y Twitter, la mayoría de nuestros lectores mostró un interés especial por la seguridad de los alimentos y la claridad del etiquetado. El eurodiputado liberal holandés Gerben-Jan Gerbrandy apuntó que éste debe ser claro y ofrecer información sobre valores que atañen a nuestra salud, como grasas, cantidades de sal, etc. Por su parte, el conservador alemán Struan Stevenson añadió que las etiquetas deben ser directas, puesto que "con mucha información, serían tan extensas como la novela de 'Guerra y Paz'".
Sobre la forma de leer y comprender el contenido del etiquetado, la socialista británica Glenis Willmott consideró que es algo que debe inculcarse en el colegio desde edades tempranas. Renate Sommer, europarlamentaria popular alemana, coincidió con Willmott, aunque expresó también su preocupación por las personas mayores, indicando que también a ellas se les debería enseñar cómo hacerlo.
Alimentos de terceros países
En cuanto a posibles amenazas de alimentos provenientes de terceros países como Estados Unidos o China, Schlyter recordó que la Unión Europea cuenta con un sistema de alerta rápida. "Cuando un país descubre algo peligroso en un lote de comida importada debe informar al resto", explicó. Renate Sommer también destacó que "estamos preparados para identificar a tiempo cualquier peligro" y resaltó que los países de fuera de la UE conocen los requisitos necesarios para vender sus productos en la Unión Europea.
Para acabar, varios productos regionales fueron promocionados en el Parlamento Europeo durante una jornada en la que, además, los cocineros los incluyeron entre sus propuestas del día. Entre ellos, la mozzarella di Bufala Campana, el queso azul de Auvernia y el jamón de las Ardenas.